Conflictividad laboral con muchos frentes ante el imparable aumento de los precios. Especialmente llamativo en el caso de las frutas que han alcanzado la mayor subida de los últimos 30 años. Tanto es así que se están modificando los hábitos de consumo.
Seis de cada diez consumidores los están adaptando a la renta disponible. Los nutricionistas advierten del riesgo de dejar de consumir en exceso frutas y verduras.
Con la subida de precios, a la hora de comprar la fruta y verdura hay que pensarlo más que nunca. Ahora hay más demanda que oferta en determinados productos como la sandía en pleno arranque de temporada. Esta subida de precios se nota en el bolsillo nada más comprar y, también, en su manera de adquirir los productos.
Si se reduce el consumo de fruta y verdura, puede afectar a la salud. Una solución para no reducir el consumo es comprar lo justo y no desperdiciar. Por eso, consumidores y comerciantes esperan que los precios bajen en los próximos días. Mientras tanto, habrá que seguir calculando muchos números antes de comprar.