Comprar una vivienda nueva en Madrid y Barcelona en los próximos meses puede ser una labor imposible según un estudio de la Sociedad de Tasación que alerta de que al actual ritmo de adquisiciones la comunidad madrileña podría quedarse sin oferta en unos cinco meses. En el caso de la ciudad condal este plazo se alargaría algo más, hasta los doce meses.
En el censo elaborado por esta entidad y recogido por La Razón, se asegura que si se mantiene la actual tendencia de alta demanda en la capital de España la oferta de nuevas promociones no podría satisfacer la compra de vivienda nueva ya que las existencias disponibles se han reducido en un 38,5 %, algo más de lo que está pasando en el resto de la región donde la disminución es del 30,8 %.
Algo similar ha ocurrido en Barcelona y su área metropolitana, según el diario madrileño. Así, en algo más de 12 meses toda esta esta zona podría quedarse sin oferta de vivienda nueva dado que las promociones han descendido en 17,8 %.
A pesar de esta posibilidad de un mercado sin oferta en vivienda nueva, los expertos apuntan a una gran demanda a pesar de la situación de incertidumbre internacional. Portales inmobiliarios como Fotocasa, Pisos.com e idealista señalan la "solidez y fortaleza" del sector, después de que las compraventas de vivienda hayan registrado su mejor marzo en 15 años tras subir las operaciones un 25,6 %, pese al inicio de la guerra en Ucrania, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según María Matos, directora de Estudios y Portavoz de Fotocasa, "el gran protagonista es la compra de vivienda, y el alquiler queda en un segundo plano". El dato lo complementa el portavoz de idealista, Francisco Iñareta que afirma: "Sin duda el volumen de operaciones cerradas en el mes de marzo supone un hito, y encadena 3 meses por encima de las 50.000 ventas, lo que da muestra de la fortaleza de la demanda por la compra de vivienda".
Desde el portal han explicado que las operaciones que se firmaron entre finales de febrero y marzo, al inicio de la guerra y cuando el sistema financiero, ya daban señales de un próximo encarecimiento de las hipotecas, lo que podría haber adelantado la compra de muchas viviendas para aprovecharse de la financiación tan barata.
"La buena noticia es que, por el momento y a pesar de que el stock disponible sigue cayendo con fuerza, estas tensiones no se han trasladado a los precios, aunque no es descartable que lo hagan si esta situación se mantiene en el tiempo", ha señalado Iñareta.
De su lado, María Matos, de Fotocasa, ha destacado que el sector inmobiliario puede constatar que sigue dando respuesta a ese "gran interés" por comprar vivienda que se inició el pasado ejercicio. "La compraventa de viviendas continúa muy sólida y liderando el restablecimiento del sector", ha enfatizado.
Así, Matos ha asegurado que el primer trimestre de 2022 llega todavía más fuerte y dinámico que los de 2021, cuando comenzó el auge de la compraventa. "Ya podemos constatar que el inicio de la guerra no ha impactado directamente en la búsqueda de vivienda y en el interés por comprar, al menos de los particulares nacionales, sigue sin frenarse", ha remarcado.
No obstante, ha destacado que si algo se puede decir del inmobiliario es que durante la pandemia ha demostrado acrecentarse frente a una crisis exógena de la que ha salido reforzado y, es probable que, frente a una guerra se despierte el apetito inversor de los particulares atraído por la vivienda como valor refugio en otro contexto de inseguridad económica prolongada.
Desde el portal inmobiliario pisos.com, su director de Estudios, Ferran Font, ha destacado que continua la tendencia iniciada el pasado verano de registros mensuales no vistos, como mínimo, desde hace una década.
No obstante, Font ha señalado que el crecimiento interanual se mantiene cerca del 25 % y, si bien sigue siendo destacable, queda lejos del periodo abril-septiembre donde se registró un crecimiento promedio que superaba el 70 %.