Los dardos vuelven a estar más de moda que nunca y todo gracias a un prodigio de solo 16 años que ha roto los esquemas de los amantes de este deporte. Hablamos de Luke Littler, el participante que ha maravillado estos días en el Campeonato Mundial, disputado en Londres (Inglaterra), al haber sido el finalista más joven de la historia. Tras vencer a su ídolo en cuartos de final, Raymond Van Barneveld, y superar la semifinal había grandes esperanzas en que pudiera conquistar el torneo. No obstante, después de un espectacular encuentro este miércoles, ha terminado sucumbiendo ante Luke Humphries, uno de los favoritos.
Littler, que ha aparecido de forma sorprendente y espectacular, ha recibido el aliento de gran parte del público durante sus competiciones. Algunos incluso le han llegado a cantar "mañana no tienes colegio" a modo de vacile y en clave de humor. Los aficionados a los dardos no dan crédito a la puntería de 'The Nuke' (misil nuclear), como es apodado. De ganar en noviembre el Mundial juvenil, ha pasado a dar un enorme salto tanto a nivel competitivo como mediático en las últimas semanas, copando portadas de numerosos rotativos deportivos.
Luke Littler, al que los fans también apodan 'el Príncipe del Palacio', es un adolescente de solo 16 años, pero son muchos los que apuntan a que tiene cara de adulto. No obstante, sus reacciones y celebraciones reflejan su juventud. Es aficionado del Manchester United y tiene novia, Eloise Milburn, una esteticista de 21 años que le acompaña en estos días tan especiales. De hecho, para preparar el partido de su vida y como parte de su rutina previa, acudió en la mañana de este miércoles a comer una tortilla de queso y jamón, recoge 'Daily Mail'.
Según explicó él mismo, tras superar la segunda ronda y meterse en las tandas finales de Londres, quiso celebrarlo con kebabs y pizzas. En redes sociales, mientras, su impacto está siendo más que notable. Deportistas y otras celebridades están empezando a querer fotografiarse con Littler, quien publica a diario contenido sobre sus entrenamientos. El joven, a pesar de esta fama, quiso regresar hace unos días a su casa de Warrington (entre Liverpool y Mánchester) para jugar a la videoconsola y rodearse de seres queridos, algo crucial en su día a día. Él es consciente del momento que vive: "Cuando voy a lanzar, casi no puedo pensar hacia dónde tirar. No paran de animarme. Es impresionante".
Littler habría cogido su primer dardo cuando tenía un año y medio, según un vídeo difundido en varias ocasiones en diferentes medios. Al parecer, se apuntó a un club de dardos con solo ocho años y, desde entonces, no paró de entrenar y competir, hasta ser una estrella mundial. Como todo fenómeno, también ha tenido polémicas a su alrededor, como la teoría de que no tiene 16 años. No obstante, en las últimas horas se ha acreditado a través de la partida de nacimiento que llegó al mundo en 2007. Littler se ha garantizado en el Campeonato Mundial 50.000 libras (casi 60.000 euros) y se ha quedado a las puertas de obtener los 500.000 del primer premio: "El sueño continua", le dijo a su madre tras uno de sus triunfos. Y es que le queda cuerda -y dardos- para rato.
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