Luis de la Fuente, en una rueda de prensa esperadísima tras la polémica por el caso Luis Rubiales y el beso que dio en la boca a la futbolista Jennifer Hermoso en la final del Mundial, ha comparecido hoy ante los medios. Sus palabras tras los aplausos que dio al presidente de la Real Federación Española de Fútbol cuando anunció que no dimitía, junto a su comunicado 24 horas después para dar un viraje y condenar su conducta, han centrado toda la expectación.
El seleccionador de España comparecía para ofrecer la lista de convocados para los partidos de clasificación para la Eurocopa 2024 frente a Georgia y Chipre, pero la mayor parte de los focos de la rueda de prensa estaban centrados en una cuestión nuclear: el comportamiento de Luis Rubiales, –cuya repercusión ha llegado hasta los organismos internacionales, motivando que haya sido suspendido por la FIFA mientras en España el TAD analiza las denuncias contra él–, y la propia reacción que él, –como técnico al frente de la selección española de fútbol masculino–, ha manifestado.
En un primer momento, Luis de la Fuente, sentado en primer plano en la asamblea extraordinaria de la RFEF, aplaudió con vehemencia las palabras del todavía presidente de la Federación mientras éste cargaba contra el “falso feminismo” reivindicando que su beso a Jennifer Hermoso fue “mutuo, eufórico y consentido”, y denunciando que era víctima de un “asesinato social”.
Lo mismo hizo Jorge Vilda, el seleccionador del equipo femenino, y ambos, en menos de 24 horas, publicaron un comunicado que iba en dirección opuesta a los aplausos que le brindaron en la asamblea. Así, Luis de la Fuente dijo censurar “sin paliativos el comportamiento equivocado y fuera de lugar del presidente de la RFEF”, señalando que “no respetaron el mínimo protocolo que debe seguirse en estos actos de celebración”, añadiendo que “no son edificantes ni apropiados para una persona que estaba representando a todo el fútbol español”.
Sobre ello, y sobre ese viraje en su posición respecto al caso que ya han bautizado en Reino Unido como el ‘kissgate’, Luis de la Fuente ha sido preguntado y se ha pronunciado:
"Buenos días. Me gustaría comenzar explicando lo que viví durante la asamblea. Yo no soy juez, ni escritor, ni periodista, soy entrenador de fútbol. Permitan que me apoye en algunas notas. Ante la repercusión social, mediática y política que han tenido mis aplausos en la asamblea del pasado viernes, quiero aprovechar este espacio, mi espacio de entrenador, de seleccionador nacional, para explicar la situación vivida".
"He recibido duras críticas por ello. ¿Saben lo que pienso de ellas? Que son totalmente merecidas, que lo lamento, lo comprendo y pido perdón por ellas”, ha señalado, al inicio de su discurso, en el que ha ahondado en lo sucedido en esa asamblea extraordinaria de la RFEF en la que aplaudió las palabras de Luis Rubiales.
"Voy a dar mi explicación sobre unos hechos injustificables: yo acudí convencido, como la mayoría de las personas, de que asistíamos a un acto protocolario de despedida de un presidente, pero se convirtió en una situación que sorprendió a muchos, para la cual, sinceramente, yo no estaba preparado. Quien me conoce sabe que estos gestos no representan ni mis valores ni mi forma de actuar en la vida. Siempre he estado al lado de la igualdad y el respeto", ha asegurado.
"Siempre he tenido un comportamiento intachable del que muchos de ustedes han sido testigos. Todos acordamos lo que sucedió tras el triunfo de nuestras jugadores en el estadio de Sídney. Y hay unas cosas que todos tenemos claro: ni Jeni no sus compañeras son responsables de lo que allí aconteció", ha dicho.
Por último, tras ensalzar la gesta de las campeonas de la selección española de fútbol femenino, ha añadido: "Me gustaría pasar página, volver a hablar de fútbol y de los importantes compromisos que tenemos que afrontar la próxima semana".
Tras estas palabras, Luis de la Fuente ha atendido a los periodistas en su ronda de preguntas, dejando claro nuevamente que se muestra arrepentido de ese gesto aplaudiendo, señalando que fue un “error” por el que pide “una y mil veces perdón”, señalando que tras verlo no se reconocía. No obstante, ha subrayado que no cree que deba dimitir, sino precisamente pedir perdón, posicionándose “al lado de la igualdad y del respeto”.
“En el comunicado ya censuré y critiqué la postura de los actos que se habían producido en la entrega de premios, con Jeni. Estaba implícitamente marcada y señalada en todos los comentarios que hice en el primer comunicado. Yo creo que no tengo que dimitir. No tengo que dimitir, tengo que pedir perdón. Cometí un error, un error humano que, lo he dicho, es inexcusable, pero del que ahora mismo, si pudiera volver atrás, no volvería a cometer, seguro”, ha dicho.
“Yo estoy del lado de la igualdad y del respeto. Todos los que me conocéis sabéis cuál es mi comportamiento. No hay duda en ello. Quien no me conozca puede que tenga alguna duda: estoy al lado de la igualdad y del respeto. Todos tenemos que mejorar en materia de igualdad, por supuesto, yo el primero, y en ese proceso estamos”, ha enfatizado.
Incómodo tras toda la polémica, en la que se ha visto señalado por sus propios gestos, Luis Rubiales ha expresado su deseo de que sea juzgado por su trabajo como seleccionador: “Es una comparecencia muy seria. Llevo nueve meses dirigiendo a la selección y hay que ver las ruedas de prensa que he tenido que tolerar. Yo creo que los resultados siempre son los que marcan. A mí me gustaría que me cuestionaran por los resultados”, ha dicho.
“Es un escenario en el que me muevo con total tranquilidad. Controlo y domino esa presión, no esta. Aquí no me siento cómodo. No me siento cómodo con que se cuestionen valores y principios que, insisto, tengo profundamente interiorizados y no son cuestionables, y eso sí me genera inquietud y me genera tensión, pero desde luego me gustaría que me cuestionaran por los resultados”.
Contestando a los periodistas, el seleccionador de ‘La Roja’ ha asegurado también que “no” se siente “traicionado” por Luis Rubiales.
“Yo llegué a esa asamblea pensando que iba a ser una dimisión y entramos en shock cuando vimos que no era así”, ha insistido, explicando: “Desde luego yo pensé que la asamblea iba a ir por otro lado”.
En la misma línea, no ha manifestado sentirse “coaccionado” para asistir a esa asamblea o aplaudir a Rubiales, aunque ha reiterado: “Estuvimos casi todos los trabajadores de la Federación, insisto, con una idea de que íbamos a actuar un acto protocolario; a la dimisión de un presidente, y nos encontramos con otra cosa totalmente diferente”.
“La verdad es que no era fácil de digerir. Y para mí no lo fue. Yo, la verdad, quedé en blanco. Fue una situación que me superó", ha señalado.
“Yo no justifico nada, es injustificable”, ha dicho Luis de la Fuente, indicando que lo que trata de “exponer” es “el contexto en el que se produce” y “la situación” en la que, dice, se vieron “algunos”.
“Permitidme que hable de mí. No quiero hablar del resto de las personas. No sé cómo lo vivieron otras personas. Yo lo viví desbordado. No supe estar a la altura y no pude controlar esas emociones. En ese contexto, cuando uno posteriormente reflexiona, sale, se ve en las cámaras… No me reconozco, y realmente es cuando uno hace su análisis en esa otra perspectiva”.
“Al principio, dentro del bosque uno no ve más que ramas. Cuando te separas del bosque empiezas a ver la realidad de la dimensión y de la situación. Entiendo que habrá gente que creerá o no este argumento. A mí me ha pasado. Es así”, ha recalcado el técnico.
Preguntado específicamente sobre por qué aplaudió, qué estaba aplaudiendo y por qué tardó más de 24 horas en emitir un comunicado, que justo además fue después de la inhabilitación de la FIFA, –lo que a más de uno le inducía a pensar que sus palabras llegaban cuando Rubiales estaba ya en el disparadero–, Luis de la Fuente ha intentado contestar matizando todo lo dicho:
“Aplaudí por ese contexto que te digo. No sé si habrás estado alguna vez en una situación de presión, de ambiente que desconoces, que te sientes incómodo, que estás fuera de sitio… A mí tampoco me había pasado y nunca había vivido una situación de ese estrés (los psicólogos me matarán) emocional”, ha dicho, antes de referirse expresamente al comunicado que realizó.
“El comunicado es muy sencillo. Cuando salgo de la sala, yo no te las habilidades, los recursos literarios que tenéis vosotros. Yo soy entrenador de fútbol y estoy capacitado y preparado para entrenar un equipo con total solvencia. Creo que lo he demostrado, llevo más de 26 años entrenando. Yo necesito un tiempo para reflexionar, para ver en perspectiva, para elaborar, para pensar y reunirme con mis compañeros, mi cuerpo técnico, y darle forma”.
“Es imposible, –por los tiempos, porque el comunicado de UEFA y el mío se llevan una hora de diferencia–, que en una hora prepare ese tipo de comunicado. Imposible. Me encantaría. Yo no soy capaz”.
“Inmediatamente, al salir de la asamblea del viernes empezamos a ver la realidad, a escuchar, a salir yo más tranquilo, y desde esa perspectiva empezamos a elaborar. Tardamos lo que pudimos tardar, y coincidió casi en el tiempo, pero es imposible que yo en una hora pueda preparar nada. No sé si ha quedado claro, pero empezamos inmediatamente nada más salir de la asamblea a trabajar, pensar, reflexionar. Hasta que pudimos sacar un texto en el que creo que reflejaba, por supuesto, todo lo que yo sentía”, ha aclarado, ante las preguntas de Matías Prats, de Mediaset.
Pese a todo lo ocurrido, Luis de la Fuente también expresa que no ha temido ser cesado: “Yo cuento con el apoyo de todos los presidentes territoriales y del presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Si yo no hubiese tenido ese apoyo y esa confianza yo no estaría aquí”, ha dicho, antes de pronunciarse respecto a las palabras que Yolanda Díaz, líder de sumar y vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones, manifestó contra él.
“Habrá gente que opine como ella, otra que no, que lo haga en otro sentido, y es una opinión más, no tengo nada más que decir”, ha sentenciado.
Más allá de la polémica, y en lo relativo a la selección española y sus partidos de clasificación de la Eurocopa, Luis de la Fuente ha avanzado la lista de convocados:
En ella, destaca especialmente la incorporación de Lamine Yamal, jugador del FC Barcelona de solo 16 años.