Las historias esperanzadoras siempre son agradables, pero ahora más que nunca. Necesitamos optimismo, y Miguel Ángel Tobías ha cumplido nuestros deseos convirtiéndolos en un emotivo documental llamado 'El guion de tu vida'. En él recoge los testimonios de ocho jóvenes con infancias marcadas por aspectos tan duros como el maltrato, la homofobia, el racismo o la soledad.
Génesis, Sergio, Mohamed, Verónica, Diana, Juan Antonio, Erika y Franciles protagonizan este documental, y si bien son muy diferentes, todos tienen algo en común: la capacidad para sobreponerse a las adversidades y convertirse en los verdaderos guionistas de su vida.
"Yo era una niña feliz con mi familia y mis hermanas. Íbamos al colegio, bajábamos al patio con los demás niños. Era todo normal". Con estas palabras comienza a narrar su historia Verónica Gastelut, una de las protagonistas de 'El guion de tu vida'.
"Al principio vivía con mi madre y mi hermana melliza. Mi hermana mayor vivía con mi padre y mi abuela", pero poco después Verónica y su hermana se mudaron con su padre y su abuela. Pese al estrés que puede suponer un cambio de vida en la infancia, cuando recuerda esa época no puede evitar sonreír. "Todo iba bastante bien. Éramos una familia normal si se puede decir así".
Sin embargo, todo cambió cuando cumplió 8 años y su abuela paterna, que era como una madre para ella, falleció inesperadamente. "Mi madre era como una más, la quiero, pero su función de madre no la hacía ella, la hacía mi abuela", confiesa.
Por un lado, su padre se encontraba devastado por esta situación a la que no sabía hacer frente. Por otro lado, su madre no podía hacerse cargo económicamente ya que padecía una discapacidad que le dificultaba encontrar trabajo.
Dadas las circunstancias, su padre pidió ayuda a una trabajadora social y decidieron que la mejor opción era conceder la tutela de Verónica y sus dos hermanas a la comunidad de Madrid. "Me acuerdo que mi padre nos sentó a las tres y nos dijo que nos tendríamos que ir a una residencia. Nos lo pintó como que no era nada malo, pero sabíamos que no íbamos a vivir con él", recuerda sin poder evitar emocionarse.
"En esa primera residencia estuvimos un año porque hubo muchos problemas. Allí no nos apoyaban", añade. Para Verónica y sus hermanas era muy duro que no les creyesen cuando contaban sus problemas o, peor aún, sentir que a los que supuestamente tenían que cuidar de ellas les daba igual que estuviesen pasándolo mal. “Al cabo de un año mi padre no soportaba esa situación y volvimos a su casa”.
Todo cambió tras una discusión entre Verónica y su madre. "En ese momento yo tenía 15 años y discutí con mi madre. Llegamos a las manos, no nos pegamos, pero sí nos agarramos y mi madre como no soportaba esa situación llamó a la policía". Poco después llegaron a la conclusión de que era incompatible vivir juntos, y mandaron a Verónica y a sus hermanas a un piso tutelado. "Esas eran las primeras Navidades que no íbamos a pasar en familia".
Después de ese incidente las cosas no mejoraron, tal y como cuenta en el documental, pero con los años consiguió encontrar un trabajo, una pasión y un motivo para no tirar la toalla.
La historia de Verónica no sólo es un ejemplo de fortaleza, sino también un reflejo de la situación que viven miles de niños en hogares tutelados y residencias para menores. La falta de apoyo social y asistencia psicológica puede pasar factura, sobre todo cuando has vivido experiencias tan duras como perder a un familiar o que tus padres no puedan hacerse cargo de ti.
A menudo olvidamos que los niños y adolescentes no sólo necesitan cuidado físico, sino también emocional. No basta con proporcionarles una cama, un baño y comida. Es fundamental escucharles, permitirles expresar sus emociones, enseñarles a resolver sus problemas interpersonales, y ayudarles a desarrollar una autoestima sólida.
En 'El guion de tu vida' Verónica ha dado voz a una realidad que por desgracia está silenciada, mencionando también el bullying que recibió en el colegio por pertenecer a una residencia de menores. Es necesario normalizar esta situación y enseñar a los niños que nadie es mejor que nadie, independientemente de su procedencia, de su raza, de su género o de su orientación sexual.
No importa si vives en un piso tutelado sin tus padres, o en una casa de cuatro plantas con toda tu familia. Eso no define tu valor como persona, y tal y como nos ha demostrado Verónica, tampoco determina tu futuro.
Si quieres conocer el testimonio completo de Verónica y del resto de protagonistas, puedes ver el documental 'El guion de tu vida' en el canal de Yasss en mtmad.