Julia, 21 años: "Creo que soy adicta a las compras y no sé si debería ir al psicólogo"
¿Alguna vez te has quedado sin dinero por ir de compras?
Identificar una adicción no es fácil, independientemente de si es al alcohol, al tabaco, al juego, al sexo o a las compras
Las colas interminables, los productos agotados en tienda y online, y la tarjeta de crédito temblando en tu cartera. No hay duda, estamos en plena temporada de rebajas. Algunas personas se conforman con un vaquero y un par de camisetas para renovar el fondo de armario, pero a veces las compras se nos van de las manos.
Según diversos estudios, hasta un 5% de la población muestra síntomas de adicción a las compras. ¿Es tu caso? Hoy te daremos varias pautas para averiguarlo de la mano del testimonio de Julia.
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El caso de Julia (21 años):
"Siempre me ha gustado ir de compras, desde que soy pequeña. Iba con mi madre y con mi hermana a tiendas de ropa y mientras algunas niñas se aburrían, yo me lo pasaba bomba probándome todo. En la adolescencia la paga me la gastaba casi toda en ropa, y en mi cumpleaños y Reyes también pedía alguna cosa del estilo.
Cuando empecé la universidad, me di cuenta de que tenía un problema. El primer año me dieron la beca y me lo gasté todo sin darme cuenta yendo de tiendas. Sé que es egoísta y que hay gente que necesita ese dinero mucho más, y mi intención no era gastármelo sino ahorrar, pero sin darme cuenta me lo fundí.
Un día estaba pagando y cuando fui a pasar la tarjeta me la denegaba. Resulta que me había quedado sin fondos.
Todos los meses mis padres me metían algo de dinero en la cuenta para pagar el alquiler del piso, la comida de la semana y algún capricho o cosas de la universidad. Pues prácticamente cada mes a mediados tenia que pedirles algo extra.
Mis padres me dieron un toque de atención y empecé a controlarme. Ya no me quedo sin dinero, pero gasto prácticamente todo en ropa y no soy capaz de ahorrar. Por suerte ya no dependo de ellos porque tengo un trabajo a media jornada, pero aun así me siento fatal porque a veces no puedo salir a cenar por ahí con mis amigas porque me he gastado casi todo mi sueldo en bobadas que no necesito y que luego ni me pongo. Tengo miedo de ser adicta. ¿Debería ir al psicólogo?".
Cómo saber si tienes una adicción
Cómo saber si tienes una adicciónIdentificar una adicción no es fácil, independientemente de si es al alcohol, al tabaco, al juego, al sexo o a las compras. A menudo se da cuenta todo el mundo antes que tú, hasta que finalmente te preguntas por qué no te lo dijeron antes.
Lo ideal es detectar las señales de alarma antes de que la situación se vuelva totalmente incontrolable. Por eso hemos recopilado siete preguntas que debes hacerte para saber si lo tuyo con las compras es una adicción o no:
1. ¿Compras más ropa de la que necesitas o de la que inicialmente pensabas comprar?
Si cada vez que vas a una tienda te descontrolas y acabas pagando mas cosas de las que o bien necesitas, o bien inicialmente tenías en mente, tal vez se te haya ido de las manos la situación.
2. ¿Has intentado dejar de comprar tanto o controlarte un poco, pero has fracasado?
Un síntoma de cualquier adicción son los intentos constantes de dejarlo y posteriormente los fracasos. La razón por la que no se consigue reducir la conducta adictiva es que a menudo no sabemos cómo lograr esa ansiada “abstinencia”. Por eso es fundamental pedir ayuda profesional.
3. ¿Dedicas gran parte de tu tiempo a las compras?
Si has quitado tiempo de ocio, de trabajo, de estudio o de tu vida social para dedicarlo a las compras, tal vez haya una adicción.
4. ¿Sientes un deseo intenso de comprar, aunque no lo necesites?
Este síntoma también se llama craving y es, en otras palabras, las ansias por consumir la droga, en este caso ir de compras. Cuando se logra superar la adicción, el craving puede permanecer y provocar una recaída.
5. ¿Has incumplido tus obligaciones laborales o académicas por ir de compras?
Si faltas al trabajo, llegas tarde o te vas antes por ir de compras, hay un problema. Igualmente, si alguna vez te han pillado mirando tiendas online en tu horario laboral plantéate pedir ayuda.
6. ¿Este problema te ha ocasionado alguna discusión, pero aun así sigues comprando compulsivamente?
Es posible que tus amigos o familiares están preocupados, y su forma de gestionar la adicción sea echándotelo en cara o actuando con incomprensión. Aunque no haya drogas de por medio, esto también es un problema.
7. ¿Has ido de compras en situaciones en las que no debías?
Por ejemplo, estando enfermo o cuando tenías poco dinero en la cuenta bancaria y lo necesitabas para cosas más importantes como el alquiler o las facturas.
Si te has sentido identificado con alguno de los puntos, pide ayuda psicológica. Recuerda que la adicción a las compras no es algo exclusivo a tiendas de ropa. También puede ser a videojuegos, productos de supermercado, cosmética, juegos de mesa y un largo etcétera.