Laura Corsini, creadora de la conocida marca Bimani, y Cristina Oria, dueña del famoso catering que lleva su nombre, han ofrecido una charla en directo para hablar de su trayectoria y motivar a cientos de jóvenes que estos días están en casa sin poder acudir a sus centros escolares.
La plataforma Inspiring girls con la colaboracion de Evax, ha querido inspirar a las niñas creando estas dos interesantes charlas. Laura cambió su producción a los pocos días de estallar la crisis para ponerse a fabricar mascarillas. "A veces creemos que la gente joven no es tan curiosa y al contrario, he visto mucho interés y curiosidad, creo que puedo ayudar a muchas niñas que aún están un poco perdidas", explicaba Laura.
Por su parte Cristina también ha cambiado su línea de producción para dedicar todos sus esfuerzos a paliar la crisis. Ambas son mujeres referente de emprendimiento y valor. "Hablar con las niñas y dar consejos es gratificante, es muy importante luchar por lo que te gusta, tienen que buscar la fórmula que les haga felices" recuerda Cristina.
Ambas colaboran con la fundación Inspiring Girls, que de la mano de Evax, busca inspirar a las más jóvenes a creer en sí mismas. La fundación ofrece charlas en colegios para dar visibilidad a distintos roles femeninos en diferentes áreas profesionales.
Un equipo multidisciplinar de investigadores de la Universidad de Jaén trabaja en el desarrollo del proyecto enfocado a implantar estrategias para reducir la ansiedad, la depresión o el malestar emocional que puedan ser provocados por el confinamiento y el temor a la enfermedad.
El objetivo es ayudar a jóvenes de entre 12 y 18 años y sus familias a afrontar de forma óptima esta insólita situación derivada de la pandemia provocada por el coronavirus. Y es que, según ha destacado el investigador y catedrático encargado del proyecto, Luis Joaquín García, "no hay salud sin salud mental y no hay futuro sin jóvenes emocionalmente sanos".
Esta iniciativa fue presentada por la UJA a la convocatoria de proyectos de investigación realizada por el Instituto Carlos III de Madrid en relación a la covid-19. De forma paralela, el equipo de trabajo ha generado una encuesta online que no sólo recoge información de los padres o responsables legales, sino que, por primera vez, "da voz a cómo se sienten los jóvenes, siendo ellos mismos quienes lo dicen, y también se da a conocer, a quien lo desee, la valoración de sus resultados", según ha explicado García.
La idea es ofrecer tratamiento a jóvenes con problemas emocionales por haber estado confinados u hospitalizados por covid-19. El objetivo es "llegar a esos jóvenes que sufren situaciones muy complicadas e intentar visibilizar sus problemas y, si detectamos a personas que están en riesgo, poder buscar estrategias para ayudarlas", ha dicho García.
En este sentido, esta línea de investigación está en sinergia con un proyecto que ya está en activo, denominado 'Daremos', que está financiado por Feder-Andalucía. La encuesta se encuentra bajo el paraguas de la Red de Excelencia para la Promoción de la Salud y Bienestar Emocional de los Adolescentes, financiada por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.
Dicho cuestionario se lanzó hace ya dos semanas, está siendo difundido a nivel nacional para el ámbito juvenil a través de diferentes entidades e instituciones y todavía sigue activo para su realización de forma completamente gratuita.
Hasta la fecha se han cumplimentado alrededor de quinientas encuestas y, una vez finalice el plazo, tocará analizar los resultados pormenorizadamente, que servirán de base para el proyecto.
Esta herramienta permite a los padres conocer realmente cómo se encuentran emocionalmente sus propios hijos y les ayuda a saber sus fortalezas y debilidades. Actualmente, ya se están enviando gratuitamente los resultados individualizados a los participantes que lo desean.
Según el profesor García, por el momento se están conociendo resultados "sorprendentes y preocupantes" porque hay "muchos jóvenes en situaciones muy vulnerables y los padres pueden no ser conscientes de ello". "Se generan problemas emocionales que pueden acabar en trastornos más graves, de ahí que nuestra misión sea detectarlos y ayudarles tempranamente antes de que los síntomas evolucionen en un problema mayor", ha dicho el responsable de la investigación