La crisis global del covid-19 lo ha cambiado todo en unas pocas semanas. Las restricciones de movimiento impuestas tras la instauración del estado de alarma han provocado un terremoto económico y social sin precedentes en las últimas décadas de nuestra historia. La expansión del virus en nuestro país apela a la consciencia y el civismo del pueblo español, al que las autoridades han pedido por activa y por pasiva que permanezca en sus hogares para limitar el riesgo de contagio.
Y mientras hay quien no termina de respetar estas directrices, hay otros cuyas acciones sirven de buen ejemplo para el resto. Es el caso de Aurora y Rubén, una pareja de Infantes (Ciudad Real) que celebró su boda a través de una videollamada rodeados de sus amigos, que no quisieron perderse semejante evento.
La pareja contrajo matrimonio de forma simbólica en su casa de Albacete en una boda oficiada por el ‘padre Jorge’, uno de sus amigos, y culminó con un baile nupcial al más puro estilo de las ceremonias tradicionales. Así, se dieron el ’sí quiero’ entre los aplausos de sus allegados en uno de los momentos más divertidos y entrañables que nos ha dejado el confinamiento.
En un momento tan delicado como el que vive nuestro país, gestos como el de Aurora y Rubén dan ejemplo y son de admirar. Además, chocan frontalmente con las situaciones vividas en otras partes de España, como en Sevilla, donde la Policía Local detuvo un vehículo en el que viajaban ocho personasocho personas, cinco de ellas niños. Además tenía la ITV caducada, una rueda pinchada y los faros rotos.