Un nuevo estudio de la Universidad de East Carolina, en Estados Unidos, ha señalado que los recién nacidos cuyas madres hicieron algún tipo de ejercicio durante el periodo de embarazo habrían mejorado la salud física de los bebés, según el ABC News.
El estudio se hizo sobre un grupo de 71 mujeres embarazadas, entre ellas algunas hacían ejercicio durante su embarazo, unos 50 minutos de ejercicio aeróbico tres veces por semana, y otras no.
Los resultados de la investigación mostraron que los bebés nacidos de madres que habían hecho ejercicio eran más hábiles para moverse y posiblemente más activos a medida que fueran creciendo.
Esto se suma también a los beneficios que estas actividades tienen sobre la propia madre, ya que reduce el estrés y el riesgo de diabetes gestacional. Además también puede ser útil a la hora del parto, ya que fortalecer los músculos puede ser de gran ayuda para la madre, llegando a lograr partos de menos duración.