Los códigos secretos para ligar en Mercadona: de colocar la piña al revés a la seriedad de las lentejas

Cuando la monologuista Vivy Lin publicó en sus redes sociales un vídeo de investigación sobre si es real o no que existe un horario específico para ligar en Mercadona, no imaginó que iba a destapar la Caja de Pandora. El rumor de que es posible encontrar pareja, permanente o esporádica, de 19:00h a 20:00h en los pasillos de este supermercado, y cuyo origen está en una cita del programa de Mediaset 'First Dates', se ha disparado en la nube y, en torno a él, han surgido un sin fin de códigos secretos que hasta Nebulossa ha seguido al pie de la letra.

La propia cómica - y su fiel amiga - se preguntaba no sólo si era real este Tinder analógico; también cómo funcionaba. Ella bromeó con hacer match con otros clientes que, al igual que tú, lleven, por ejemplo, "leche sin lactosa" dentro del carro, como un signo de que, al menos, hay una compatibilidad alimentaria. Y no estaba mal encaminada. Gracias a los usuarios de las redes, toda España ha descubierto qué hay que hacer en Mercadona para ligar en una hora y todo radica en la elección de los productos a la vista:

El primer símbolo que se hizo viral fue el de meter una piña del revés en el carro de la compra; una posición llamativa para una fruta que indica que no se ha puesto así por casualidad y que, por tanto, si el cliente se encuentra a la hora indicada, tiene intención de ligar. Chocar el carrito apiñado con otro que contenga el mismo alimento, es la forma correcta de hacer match.

Si a la piña invertida le añadimos un paquete de lentejas, el soltero o soltera está indicando que busca una relación seria, dada la larga conservación de las legumbres y lo hogareño que resulta comerse un buen plato de este guiso. Si la piña va sola, es que sólo se quiere encontrar un rollo de una noche.

Si, por el contrario, en el carro también hay un paquete de lechuga común o una pizza precocinada, es que el mercadoner está buscando una relación esporádica, corta, pero no tan fugaz como la de una sola cita. La lechuga es comestible durante unos pocos días y la pizza precocinada es un plato rápido, poco elaborado. Por lo que la relación sería algo similar.

Que nadie se crea que en Mercadona no se puede encontrar el amor verdadero, porque el lenguaje de las frutas también sirve para encontrar un marido o una esposa para toda la vida. La intención de que el encuentro en el supermercado acabe en boda se demuestra, según las leyes virales, metiendo un melón en el carrito, esperando chocar con otra persona que contenga lo mismo.

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