La gamba mantis es un crustáceo del orden 'Stomatopoda' que no pasa desapercibido por sus llamativos colores, muy vivos. Con una medida aproximada de 12 centímetros, habita en el gran arrecife de coral de Australia. Se trata del animal más fuerte en relación a su tamaño.

Si por algo se caracteriza, detalla el estudio publicado por la revista iScience, es por la capacidad de agredir a sus presas, con unos puñetazos cuya velocidad es superior a la de una bala de calibre 22.

Unos golpes bajo el mar a 80 kilómetros por hora, con sus tenazas delanteras tipo martillo, con los que podría romper los cristales de los acuarios. En una comparación, su fuerza equivale a la de un hombre capaz de levantar treinta coches.

La fuerza y velocidad de su gancho son su medio para alimentarse, ya que son capaces de abrir sin problemas los caparazones de sus presas (cangrejos y almejas). Esa rapidez de la pinza crea una burbuja de aire que implosiona en un fenómeno conocido como cavitación.

Para golpear de ese modo sin romper sus garrotes, recoge el citado medio científico, la gamba mantis cuenta con un núcleo especial amortiguador que tiene una estructura molecular diferente a cualquier otro animal. Dicho compuesto, denominado Estructura Bouligand, evita que las pequeñas grietas se conviertan en una fractura total.

"Si le pidieras a un ingeniero mecánico que hiciera un resorte que pueda almacenar una gran cantidad de energía elástica, no pensaría en usar cerámica", aseguró Ali Miserez, científico de materiales de la Universidad Tecnológica de Nanyang, en Singapur, quien dirigió la investigación.

Los mejores resortes, aquellos que pueden contener más energía, son rígidos y extensibles. Pero en los materiales, estas características generalmente no van de la mano. Para superar este desafío, el resorte en forma de silla de montar de la gamba mantis tiene dos capas. La capa superior es un material biocerámico mineralizado similar al hueso, mientras que la capa inferior es fibrosa, como una cuerda.

Existen cerca de 400 especies diferentes de langosta mantis, tal y como se hace eco El Español a raíz del estudio. La mayoría tiene garrotes, pero algunas, en su lugar, poseen 'arpones'. En vez de destrozar a su presa, la ensartan con fuerza y velocidad.

Los estomatópodos son animales agresivos que viven en madrigueras y, solo de manera ocasional, salen de ellas para cazar comida o cuando factores externos obligan a marcharse.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.