Los tatuajes son para toda la vida, por eso a la hora de escoger el que queremos que luzca sobre nuestra piel, además de asegurarnos de que no hay errores que nos acompañen para siempre, es importante saber cuál nos resulta más afín, con qué estilo nos sentimos más identificados.
Para muchas personas es importante llenar su cuerpo de color, otros prefieren hacerlo con trazos oscuros. Hay quienes quieren cubrir toda la superficie posible de su piel, pero también están los que buscan diseños detallistas y sencillos. Estos últimos seguro que se dejan seducir por los conocidos como tatuajes ‘fine line’.
Como su nombre indica, estos tatuajes están diseñados y creados para hacerse con un trazo finísimo, esa es su seña de identidad. Son una de las tendencias del momento, en estos últimos meses han visto cómo su popularidad crecía como la espuma, por eso es importante buscar a un artista que sepa hacerlos bien, para que siempre luzcan como fueron creados.
Para que se vean bien, estos tatuajes tienen que ser muy precisos, el tatuador tiene que controlar la técnica, no solo a la hora de seleccionar las herramientas, suelen usarse agujas más finas, también tener un pulso preciso y saber darle la precisión exacta. Tiene que ser un experto en este tipo de tatuajes.
Si es así, el resultado puede ser una verdadera obra de arte, elegante, sencilla y cargada de encanto.
Además, como las agujas son más finas, suelen ser menos dolorosos de hacer y también cicatrizar más rápido, lo que no quiere decir que haya que prestar menos atención a los cuidados que hay que proporcionarle. Es necesario ser precisos y seguir las instrucciones de los expertos, para que cicatrice bien y no sea necesario tener que repasarlo.
Se buscan diseños elegantes y llenos de significado porque el resultado son líneas sencillas y cargadas de belleza. En general suelen emplearse para mostrar varios diseños diferentes en alguna parte del cuerpo, no es raro hacerse varios diferentes a lo largo de los brazos, por ejemplo, o en las manos.
Al ser un trazo más fino, es una buena opción para tatuarse palabras, sobre todo con una caligrafía de trazo único, que casi se asemeja a una línea recta, pero tampoco es raro escoger una frase con significado y grabarlo sobre la piel en letras mayúsculas. Ofrece la posibilidad de lucir sobre la piel finos detalles, como iniciales en una tipografía especial.
Los diseños vegetales son un clásico en el mundo del tatuaje, también de los fine line, trazos sencillos, mínimos, con los que se crean siluetas de flores, pero también de figuras humanas y animales. En ocasiones se les añaden sombras, que suman profundidad, pero casi siempre se evitan los colores, este tipo de tatuajes suele escoger el blanco y negro.
Las figuras geométricas suelen estar entre los más deseados, como también las constelaciones, signos zodiacales, destellos o las fases de la luna. Pequeños dibujos que aportan un toque diferente y elegante, trazos delicados que convierten la piel en un lienzo lleno de sutileza.