¿Qué debemos tener en cuenta al comprar una casa de segunda mano para reformarla? El arquitecto Edu Saz nos da algunas claves en su canal de YouTube, donde aborda temas relacionados con el mercado inmobiliario, las finanzas personales y el desarrollo personal.
En uno de sus videos, que ha superado las 195,000 reproducciones, nos muestra los tres tipos de viviendas que, según su criterio, deberíamos evitar si queremos hacer una reforma.
El primer tipo de vivienda que nos desaconseja son las que tienen la entrada en una esquina, sobre todo si son alargadas. Estas viviendas suelen tener solo ventanas en un lado y un pasillo muy largo que comunica las diferentes estancias, haciendo que tardemos más en llegar al otro punto de la casa.
Para mejorar este tipo de viviendas, el arquitecto propone cambiar la distribución y colocar la zona de día, es decir, el salón-comedor y la cocina, cerca de la entrada, y dejar el pasillo solo para la zona de noche. No obstante, advierte que en los edificios antiguos este tipo de viviendas puede presentar mayores dificultades, como tener la zona de patios interiores al inicio de la vivienda y la zona exterior, que da a la calle, al final. "Ese es el peor de los escenarios porque ahí sí que sí vamos a tener que colocar las habitaciones al inicio y por tanto vamos a necesitar un pasillo que nos lleve hasta el final de la vivienda, que es donde va a estar la zona de día"; comenta Saz.
El segundo tipo de vivienda que nos desaconseja son las que tienen un tamaño pequeño y un gran muro de carga en el centro. Este muro impide modificar la distribución del piso, lo que limita las posibilidades de diseño y hace que el espacio se vea reducido.
Aunque menciona que hay excepciones y que se puede valorar la opción de derribar parte del muro de carga, advierte que este tipo de proyectos requieren más tiempo de tramitación y aumentan considerablemente el coste de la obra.
El tercer tipo de vivienda que nos desaconseja son las llamadas viviendas ‘tipo tubo’, que tienen una forma alargada o irregular, como un tubo o una bota, y están situadas entre dos medianeras o subdivisiones. Estos pisos suelen estar rodeados por otros edificios, lo que significa que no tienen ventanas en gran parte de la vivienda. Además, la distribución estrecha y extraña del pasillo dificulta cualquier intento de reforma, haciendo que el proyecto sea más costoso y complejo.
Como recomendación final, el arquitecto nos insta a no fiarnos totalmente de los planos que nos proporcionan las inmobiliarias, ya que podrían no reflejar la realidad de la propiedad y sus dimensiones.