Inma Segura, una mujer en Almería, vivió una situación insólita al hallar una serpiente que se había colado por su inodoro. La almeriense había vuelto de Málaga a su casa en Pujaire y se encontró con una serpiente bastarda de 2,30 metros al levantar la tapa del wáter.
La mujer se angustió al ver que el reptil no se iba y estuvo casi 24 horas en su baño. "Daba seis o siete vueltas en el wáter, muy angustioso, cuando la encontré bajé la tapa temblando"; comentó Inma al portal IDEAL por teléfono. Enseguida, avisó a su madre, que cuidaba de su hijo de nueve meses. "Cuando le dije que había una serpiente no se lo creía, y cogió un palo de la escoba, pero no sirvió para nada porque quería salir de allí"; contó.
Al no poder sacar al animal por sí mismas, pidieron auxilio a más refuerzos, a su tío y a una vecina para intentar extraerla. Sin embargo, la serpiente era demasiado grande para manipularla. Entonces, decidieron llamar al Servicio de Emergencias para solucionar el problema.
Preocupada por el reptil en su casa, Inma informó a las autoridades sobre el bebé en la vivienda y la duda de cómo la serpiente había entrado allí. El Servicio de Emergencias alertó a la Policía Local de Níjar y a la Guardia Civil pero, mientras tanto, la batalla con el animal continuaba en su domicilio: "le dimos con un palo y desapareció, se había ido del inodoro"; aseguró Inma.
Mientras esperaban la llegada de ayuda, los bomberos también fueron avisados, pero desgraciadamente no pudieron acudir porque no disponían de los medios necesarios. Sin embargo, les recomendaron echar agua fuerte en el inodoro para espantar a la serpiente con su olor. Asustadas por la situación, Inma y su madre cerraron todo y pusieron una toalla en la puerta.
"Teníamos mucho miedo, nosotras teníamos al bebé allí, estábamos muy preocupadas por dormir con la serpiente en la misma casa"; relató Inma durante las declaraciones telefónicas a IDEAL.
La Guardia Civil llegó de madrugada, pero la serpiente seguía sin salir, lo que dificultó su captura. La tensión duró casi 24 horas hasta que finalmente, el viernes, Protección Civil consiguió sacar a la serpiente de la casa usando agua a presión.
Inma, aliviada, comentó que este tipo de situaciones no son habituales en la zona, aunque viviera en el campo. Afortunadamente, todo acabó bien y la serpiente fue retirada de su hogar sin causar daños. "Fue un momento muy horrible, los de Protección Civil la sacaron viva y se la llevaron fuera", relató la almeriense. "Son situaciones que nunca te planteas que pueden pasar, solo se ven en las películas o en otros países, pero ¿en Almería?"; preguntó, incrédula. "Es alucinante, mi madre aún tiene el miedo, pero es normal".
La almeriense recuerda que esta ha sido una experiencia única, ya que aunque algunas vecinas hayan tenido encuentros con reptiles, nunca habían visto una serpiente bastarda como esta en la zona. En tono jocoso, mencionó que alguna vez una vecina encontró una serpiente en el lavavajillas, lo que también resultó en un susto.