La 'abuela podcaster' de 100 años que lleva un programa con consejos para nietos y compañeros de residencia en Valencia

  • Milagros Castellá, una mujer de 100 años que vive en una residencia en Patacona, Valencia, se ha vuelto 'podcaster' y dirige un programa radiofónico

  • En el podcast, ofrece consejos a los nietos "para saber cómo darle vida a los años" y comparte su espacio con otros compañeros de la residencia

  • Abuelas influencer, nunca es tarde para la fama

Milagros Castellá, una mujer cercana a los 101 años de edad, ha logrado hacer realidad uno de sus sueños y se ha convertido en 'podcaster', al presentar un programa de radio-consejos para nietos y compañeros de residencia en Patacona, Valencia.

Castellá vive en la residencia de ancianos Ballesol y lleva una serie de podcast en los que ofrece consejos a los nietos "para saber cómo darle vida a los años". Además, comparte su espacio con otros compañeros de la residencia, a los que quiere "insuflar optimismo y ganas de contar sus historias de vida"; como las de 'Diamantino', nick de redes sociales de Pedro Armando Fornes, de 94 años, con quien realiza el programa.

Milagros Castellá, sobre su programa: "Hay que dar voz a las personas mayores"

"Hay que dar voz a las personas mayores, la sociedad no puede dejar de lado el legado ni la experiencia que dejamos, queremos que nos pregunten, aunque nuestra audiencia sea muy limitada pero muy fiel"; comentan los dos presentados al concluir cada podcast. Este proyecto surgió al comprobar los profesionales del centro de Ballesol los beneficios que otorgaba "cuidar atendiendo a la historia de vida"; según un comunicado de los responsables de la residencia.

"Uno de los objetivos con los talleres de radio-podcast es reforzar la atención, el aprendizaje y memoria de los ancianos participantes, ayudándoles a mantenerse activos mentalmente, y estimular su memoria a corto plazo", explica Javier Simarro, técnico de animación sociocultural (Tasoc) en la residencia.

"Yo sí tengo ganas"

El nombre del su podcast, 'Yo sí tengo ganas', viene de "la triste común idea de dos amigas que pensaban que haber perdido la juventud les quitaba las ganas de vivir", según relata Castellá.

Su proyecto no es un simple programa radiofónico, sino una lucha contra el edadismo, los estereotipos y prejuicios que rodean a la tercera edad, y una proclama sobre "cómo llegar a los 100 años con dignidad y esperanza, dejando de pensar en lo que fuimos para ser más objetivos y buscar el optimismo en lo que nos rodea".