Curiosidades sobre el murciélago zorro, en peligro de extinción, que causa revuelo en la Red

  • El zorro volador filipino, considerado el murciélago más grande del planeta, habita principalmente en Filipinas

  • Dicha especie se encuentra en peligro de extinción debido a la deforestación de los bosques y a la caza furtiva

  • Se alimentan de fruta, flores y néctar y su sentido de orientación se fundamenta en la vista, no en la ecolocalización

El murciélago diadema de Filipinas o zorro volador filipino (acerodon jubatus) es una especie de megaquiróptero de la familia pteropodidae. Los zorros voladores pertenecen al taxón de los murciélagos y están considerados como los más grandes que existen en el planeta.

Dicho animal, que no ha pasado desapercibido en la Red y ha llamado la atención de los internautas, se encuentra en peligro de extinción debido a la deforestación de los bosques y a la caza indiscriminada y furtiva para conseguir su carne. Otros animales que tienen riesgo de desaparecer son los tiburones.

¿Cómo es y dónde habita el murciélago zorro?

Estos murciélagos son conocidos como zorros voladores por su parecido físico con dicho mamífero. Carecen de cola, tienen un hocico largo y puntiagudo, pequeñas orejas y unos enormes ojos.

Sus alas llegan a medir entre 1,5 y 1,7 metros, mucho más que el tamaño total que suman su cuerpo y su cabeza, que puede oscilar entre los 17 y los 29 centímetros. Con un peso alrededor de un kilo (o poco más), residen sobre todo en las selvas tropicales de Filipinas, en los árboles de madera dura, cerca de acantilados o en pendientes que son empinadas e inaccesibles.

Los zorros voladores filipinos viven aproximadamente 15 años. La gestación dura entre 140 y 190 días y nace una sola cría en cada parto, ocasionalmente dos. Su conservación en la naturaleza es vital puesto que es un importante polinizador y dispersor de semillas para muchos árboles frutales del mencionado país asiático.

Su principal alimento son cuatro especies de higos de la zona, aunque también comen otras frutas, flores y néctar. A diferencia de la mayoría de quirópteros, que son nocturnos, insectívoros y se orientan a la ecolocalización mediante ultrasonidos, los zorros voladores son crepusculares y utilizan la vista para guiarse en los vuelos y localizar la comida. Llegan a viajar más de 40 kilómetros en una sola noche para buscar alimentos.

La administración municipal de Maitum, en la provincia filipina de Sarangani, ha organizado una campaña para evitar que esta rara especie desaparezca. Además, algunas agencias conservacionistas, como Bat Conservation International, Wildlife Conservation Society o Fondo Mundial para la Naturaleza, promueven su recuperación.

De hecho, el año pasado, en Terra Natura Benidorm (Alicante), nacieron seis crías con un peso aproximado de 50 gramos y un tamaño de unos ocho centímetros. El equipo de expertos del parque alertó entonces de la amenaza de supervivencia que sufre esta especie. Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, esta especie ha registrado un descenso del 30% durante los últimos tres lustros.