La única pirámide que existe en España tiene los días contados

  • La única pirámide que existe en España tiene los días contados: está en Burgos y su existencia despierta mucha polémica

  • Se trata de la Pirámide de los italianos, un monumento que inauguró en agosto de 1939 el dictador español Francisco Franco

  • La Ley de Memoria Democrática tiene la intención de eliminar la construcción, de más de 20 metros de altura

La única pirámide que existe en España tiene los días contados. Sí, por dificil que parezca, nuestro país alberga una pirámide. No obstante, su existencia está generando controversia. Se trata de la Pirámide de los italianos, un monumento que inauguró en agosto de 1939 el dictador español Francisco Franco como homenaje a los soldados que le prestó Benito Mussolini en la Guerra Civil.

La Ley de Memoria Democrática tiene la intención de eliminar esta construcción de más de 20 metros de altura que se encuentra en la provincia de Burgos, en el Valle de Valdebezana, cerca del embalse del Ebro. El mausoleo acogió los cadáveres de 384 militares italianos del Corpo Truppe Volontarie hasta la década de los 70, cuando fueron repatriados.

La Pirámide de los italianos, un monumento que levanta polémica

Muchos familiares se acercaban hasta la zona como homenaje. No obstante, en 1971, un accidente de autobús que llevaba a varias personas hasta el mausoleo, y que dejó 12 víctimas mortales, hizo que los cuerpos fueran exhumado y repatriados.

La pirámide está abandonada

La pirámide está abandonada, pero los nichos siguen con las placas de los nombres de los fallecidos. El mausoleo se incuirá en el catálogo de monumentos franquistas, por lo que tiene los días contados. Uno de los políticos que lo ha solicitado ha sido el Senador de Compromís, Carlos Junet.

La Ley de Memoria Democrática procederá a su demolición

La Ley de Memoria Democrática considera contrarios todos aquellos monumentos que realicen menciones conmemorativas en exaltación, tanto personal o colectiva, de la sublevación militar y la dictadura de Franco. Algunos vecinos de la zona piden que no se proceda a la demolición y recurrir a otras alternativas, como retirar motivos fascistas y utilizar la construcción para otros fines.