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La teoría sobre chocar los cinco del psicólogo y especialista en crianza John Rosemond ha dejado a más de uno perplejo.
El chocar los cinco a los niños, hasta ahora considerado como un gesto amable y que mostraba cierta confianza entre el menor y el adulto, es desaconsejado por Rosemond.
Al parecer y según describe, no debes chocar los cinco con los niños porque no son nuestros iguales y si haces esto probablemente comenzará a desobedecerte.
Según recoge HuffingtonPost, Rosemond considera que el respeto de los niños por los adultos es muy importante para el desarrollo del menor y por ello el chocar los cinco no lo considera “compatible con el respeto”
El psicólogo cree que los adultos no deben tratar a los menores como sus iguales, por ello él nunca ha chocado los cinco a su nieto, pese a la extrañeza que sintió su hijo cuando su nieto se lo pidió.
“El niño al que se le permite chocar los cinco con un adulto tiene permiso tácito para hablar con dicho adulto como si fueran compañeros. No se pregunte por qué, si choca los cinco con su hijo, a menudo le habla como si fuera su igual”
El psicólogo cree que los niños “más felices son los más obedientes…mezclarnos como iguales a niños y adultos, hace problemáticas las relaciones·
La columna del psicólogo en el periódico Omaha World-Herald causó gran impacto a los lectores, mucho de ellos críticos con el consejo de Rosemond de no chocar los cinco a los niños.