En verano se producen millones de desplazamientos en las carreteras españolas. Los métodos más habituales para viajar son el coche, el tren o el autobús. Aunque, también existen otras posibilidades más económicas desde la llegada de las aplicaciones móviles en las que se puede compartir vehículo con usuarios anónimos que van al mismo destino. Desde estas aplicaciones, un conductor que se dirige a un destino ofrece a todos los usuarios que quieran a llevarles al mismo destino o a otro que quede cerca. Una vez acordada la cantidad económica del viaje, se inicia el trayecto y, después, se valora la calidad del conductor mediante la aplicación móvil.

En general, estas experiencias suelen salir bien y estas aplicaciones móviles suelen tener mucho éxito para usuarios jóvenes que no se pueden permitir un viaje solos o un billete de tren o autobús. No obstante, a los usuarios no siempre les queda un buen sabor de boca y se pueden producir momentos incómodos y experiencias bastante desagradables.

Un ejemplo es el que le ocurrió a una joven que ha decidido utilizar las redes sociales para contar qué le pasó a bordo de un coche junto a otras dos jóvenes a las que no había conocido antes. "Pues nada me va a tocar contar mi terrorífica experiencia y porque ni yo ni otras dos chicas vamos a usar BlaBlaCar en un tiempo muy largo", empezaba contando en un hilo que ha publicado en Twitter la joven damnificada.

"Este señor ha tenido a tres chicas, entre ellas yo, atemorizadas durante horas en un coche. Lo hemos pasado realmente mal. Cuando me subí al coche una de las chicas ya llevaba CUATRO HORAS dando vueltas con él a solas, porque no paraba de perderse y tomar dirección contraria, etc. La otra chica llevaba una hora en la misma situación y luego ya me subí yo", explica la joven en sus redes sociales. .

Además de este trato a las pasajeras, las tres jóvenes tuvieron que sufrir el comportamiento desagradable y poco apropiado del conductor del vehículo en el que iban montadas las tres. "Desde el principio del viaje hicimos un grupo de WhatsApp por lo que pudiera pasar. El hombre no paraba de arrimarse a una de las chicas y hacerle comentarios babosos, además de presumir de haber sobado a otras tantas en un festival. Iba desorientado y sin dormir. En un momento dado llegamos a un peaje y atravesó la barrera de hierro del peaje llevándosela por delante, dándose a la fuga y pegándonos un susto de muerte. Ahí ya cualquier tipo de cachondeo desapareció", apunta.

Tras este episodio, una de las pasajeras empezó a sufrir un ataque de pánico y el trayecto tuvo que detenerse. "Mientras él se reía y hacia bromas con que no le quedaba otra opción. Antes de hacer la parada dijo que tenía el tanque vacío y que no tenía dinero para la gasolina, y que si queríamos llegar a nuestro destino tendríamos que pagársela. Me pidió repetidas veces dinero", denuncia la joven.

Una vez calmada la situación de la pasajera que sufrió el ataque de pánico, el trayecto se volvió a retomar: "En la parada nuestra compañera se tranquilizó un poco e intentamos hablar con el. Nos dijo que no tenía dinero y que era nuestra responsabilidad también por haberle hecho moverse. Empezó a ponerse agresivo conmigo para que se lo 'prestase'. 'Te juro que te lo devuelvo'". Ahí tres chicas encerradas en un coche destartalado en medio de la nada, con un pavo baboso y que nos había puesto en peligro y encima, sin gasolina. Seguía perdiéndose y tomando caminos que no eran. Le dejamos algo de dinero para por lo menos llegar a la primera parada juntas".

Una vez desembolsado el dinero para poder continuar con el viaje, el dueño del vehículo continuó pidiéndoles a las jóvenes más dinero: "'Me vas a dar veinte euros'. 'No Celia, ahora me vas a tener que dejar 35 euros'. Todo en tono impositivo. Una compañera, la más echa pa'lante, intentó razonar con el. "Cállate que hablas mucho, no dejas hablar".

Tras este horrible testimonio, los usuarios de Twitter no han tardado en mostrar apoyo a la joven que ha relatado su historia. Asimismo, muchos de ellos han aconsejado a la joven que no lo denuncie solo en las redes sociales sino que también vaya a una comisaría para evitar así que otras jóvenes se puedan enfrentar a esta situación y a este conductor.

Por su parte, desde el perfil social de la aplicación móvil se han puesto en contacto con la joven damnificada y, también, le han realizado el reembolso de este viaje que, seguro, no querrá repetir.

"Por otro lado, hemos intentado contactar contigo telefónicamente, pero no hemos podido encontrarte. Te hemos enviado también un mail, informándote acerca de tu reembolso, y ofreciéndote la asistencia necesaria. Quedamos a tu entera disposición. Un saludo", apuntan desde el perfil social de BlaBlaCar.