Los hermanos Riklin, ambos artistas conceptuales originarios de Suiza, han sorprendido al mundo con una de sus últimas creaciones: un 'hotel de cero estrellas' que pretende romper con los clichés habituales y busca, lejos del objetivo de la mayoría de los alojamientos de este tipo, remover conciencias e incitar a la reflexión.
Asentado sobre la localidad de Saillon, comuna suiza del cantón del Valais, en el distrito de Martigny, este peculiar y particular hotel apenas cuenta con una cama, una mesita de noche, sábanas, almohadas y un emplazamiento que puede llegar a ser de lo más singular, como muestran las imágenes, pues puede incluso ser móvil.
“Dormir no es el punto”, ha explicado Frank Riklin, quien precisa que todo el mundo está invitado a participar de su curiosa iniciativa para ‘agitar las mentes’ y llevar a las personas a pensar sobre cuestiones que están sucediendo ya, que nos afectan a todos y que es necesario cambiar.
"En pocas palabras, ahora no es el momento de dormir, tenemos que reaccionar", añade su hermano Patirk, quien explica que hay que cambiar el rumbo con el que el conjunto de la sociedad está moviéndose en una y otra parte del planeta.
En este particular proyecto, también ha participado el hotelero Daniel Charbonnier, y cuenta con tres suites similares que están disponibles por un módico precio: 325 francos suizos, es decir, unos 321 euros, por un auténtico ‘sueño imperfecto’.