El cantante Joaquín Sabina ha pasado la noche estable en la Clínica Ruber Internacional, donde ayer fue operado de urgencia por un derrame cerebral. El artista sufrió una aparatosa caída el pasado miércoles cuando ofrecía un concierto en el Wizink Center en Madrid.
Sabina sigue ingresado en la UCI por el "hematoma intracraneal". El representante José Navarro 'Berry' ha dicho "está todo normal", a la espera del nuevo parte médico.
Para saber si la intervención ha salido bien hay que esperar entre 24 y 48 horas, según ha explicado el mánager.
Sabina dejó a su público sin respiración cuando dio un paso en falso sobre el escenario y se caía al foso. Rápidamente se le evacuó en camilla y, poco después, era él mismo el que volvía a escena, en silla de ruedas, para explicar lo ocurrido.
“Me voy a ir al hospital porque el hombre lo tengo muy, muy dolorido”, aseguraba el cantante sobre el escenario acompañado de su amigo y compañero Juan Manuel Serrat.
Tras llegar al hospital, los sanitarios le convencieron para que se quedara en observación. Lo que al principio parecía una fractura de hombro acabó siendo un derrame cerebral a causa del fuerte golpe en la cabeza.
En mitad de la noche, hubo que intervenirle de urgencia. “La operación ha sido un éxito, es un momento delicado pero todo ha salido bien”, explicaba su representante con lógica preocupación.
Sabina tendrá que permanecer en observación, en la UCI, en las próximas horas.