Después de que la policía confirmara que la actriz Naya Rivera murió ahogada, su familia, que había mantenido un completo silencio hasta ahora, ha pedido respeto en un momento tan complicado. No obstante, han agradecido las muestras de apoyo recibidas todo este tiempo.
La familia de la actriz de Glee ha mostrado su “gratitud y ovación a la heroína que la encontró” y a todo el departamento de policía que ha trabajado sin descanso por encontrarla.
En un comunicado, la familia dice estar “agradecida con fans y autoridades, quienes buscaron arduamente el cuerpo durante los últimos días”. "Estamos muy agradecidos por la efusión de amor y oraciones por Naya, Josey y nuestra familia durante la semana pasada», dice el texto.
“Mientras lamentamos la pérdida de nuestra hermosa leyenda, tenemos la bendición de honrar su legado eterno y su espíritu magnético. Naya tenía un talento increíble, pero además era una gran persona, madre, hija y hermana “, recoge el comunicado.
“Solicitamos amablemente que se respete nuestra privacidad durante este momento tan difícil”, concluye el comunicado.
La autopsia ha revelado que Naya Rivera murió por ahogamiento cuando nadaba en el lago Piru, en California. La policía ha confirmado que no había rastro ni de alcohol, ni de drogas en su cuerpo. No se identificaron tampoco lesiones traumáticas ni procesos de una enfermedad en la autopsia de la actriz de 33 años.
Como relató su hijo Josey, de cuatro años, a los agentes, él y su madre salieron a dar un paseo en un bote y en algún momento se echaron a nadar. Antes de ahogarse la actriz logró poner al niño en la cubierta pero no pudo salvarse ella. El niño dijo que vio a su madre hundirse en el agua.
El lago Piru es conocido por su peligrosidad. No es la primera vez que alguien muere ahogado allí. A veces se formar fuertes corrientes. Algo similar le pasó en 2009 a una niña de nueve años, Denis Arredondo, que murió mientras se bañaba con su familia. Su padre intentó sacarla del agua pero no pudo.