Gracias al movimiento feminista #MeToo el mundo del cine se ha visto obligado a incorporar la figura del coordinador de intimidad durante los rodajes. Es una persona que se encarga de supervisar las escenas de sexo y de que las actrices se sientan lo más cómodas posible.
Estos nuevos profesionales no dejan nada a la imaginación, cada movimiento está pactado y supervisado. Deciden dónde están los límites, qué está bien enseñar y qué no. Alicia Rodis antes coordinaba escenas de lucha. Declara que al fin y al cabo es lo mismo, una coreografía que los actores tienen que seguir paso a paso.
El escándalo de Harvey Weinstein sacó a la luz las horribles sorpresas que escondían las camas de Hollywood y desde entonces, la demanda de los coordinadores de intimidad es imparable. Hace un mes que es obligatoria su presencia en todos los rodajes de escenas subidas de tono en Estados Unidos. Su trabajo es asegurar que nadie se pasa de la raya y que el ambiente sea cómodo para ellas. Hacen que las escenas íntimas sean aún más íntimas.