Muchos padres con hijos adolescentes no consiguen entender ciertas expresiones. Anglicismos como NPC, banning o bufear forman parte de un vocabulario que procede de los videojuegos. Hay quienes consideran que esto les ayuda a mejorar el inglés, pero otros critican que debilita el español.
Los reconocemos. Hemos tenido que bufearnos a fondo para elaborar esta noticia. "Los jóvenes en general tienen mucha tendencia a romper con las normas establecidas. Entonces, esto en el lenguaje se traduce por esta búsqueda de una jerga propia diferenciada de la del mundo adulto", explica Ona Domènech, profesora de los Estudios de Artes y Humanidades de la UOC.
Y es en los videojuegos actuales donde sacan estos términos ("muchos no vienen traducidos al español"). Hay muchos ejemplos de términos incorporados a la vida diaria. NPC ("un personaje no jugador", bufear ("mejorar las habilidades de un personaje", "barra de energía para arriba"), haters ("una persona que tiene un odio irracional hacia un tema o personaje o algo en concreto") o banear ("echar a una persona de un videojuego", "a veces es para siempre o durante un rato, pero significa que ahí ya no pasas"). De esto va ahora la partida.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento