La hija de Katy Perry aparece por primera vez durante su último concierto en Las Vegas

Katy Perry ha querido darle un momento para no olvidar a su hija Daisy Dove durante su última actuación en Las Vegas, como parte de su residencia musical "Play". La cantante mostró en pantalla durante un segmento del espectáculo a su niña de tres años, nacida en agosto de 2020 fruto de la relación con su prometido, el actor Orlando Bloom.

Antes de interpretar su single de 2008 Hot 'n Cold, Perry se dirigió a su hija Daisy, que se encontraba entre el público vestida de Minnie Mouse, y le proclamó su amor. También le dedicó unas palabras a Orlando Bloom, al que describió como un “sistema de soporte increíble” y un “padre increíble”.

Katy Perry, sobre Daisy Dove: “Ella me hizo entera, me curó y me mostró cómo jugar de nuevo

La relación con su niña se volvió un componente fundamental de su espectáculo en Las Vegas, el cual la cantante aseguró que creó tras el nacimiento de Daisy Dove. “Ella me hizo entera, me curó y me mostró cómo jugar de nuevo”, compartió la cantante. Perry señaló que su espectáculo está pensado para “el niño interior de cada uno y la esperanza que tal vez si todos pudiéramos ver la vida a través de los ojos de un niño, seríamos libres”.

Perry dio a conocer su embarazo con Daisy en el vídeo musical de su canción “Never Worn White”, lanzado en marzo de 2020. Después de que su pequeña naciera, Perry y Bloom revelaron la noticia al mundo a través de UNICEF, con una foto en blanco y negro en la que se les ve coger de la mano a su hija y un emotivo mensaje que en el que recordaban cómo, en aquel momento, el mundo, y especialmente las mujeres embarazadas, se encontraban en una difícil situación debido a la pandemia.

“Sabemos que somos los afortunados y que no todo el mundo puede tener una experiencia de parto tan tranquila como fue la nuestra. En comunidades de todo el mundo sigue habiendo escasez de personal sanitario y cada once segundos muere una embarazada o un recién nacido, la mayoría por causas evitables. Desde COVID-19 muchas más vidas de recién nacidos están en peligro debido a la mayor falta de acceso a agua, jabón, vacunas y medicamentos que previenen enfermedades. Como padres de un recién nacido, esto nos rompe el corazón, ya que empatizamos con los padres que luchan ahora más que nunca”, explicó la pareja cuando nació Daisy.