La vida de Villano Antillano dio un giro 180º en apenas unos meses. Desde que hizo su session 51 junto a Bizarrap, el productor argentino que la catapultó a la fama, la rapera trans se ha convertido en un referente de la comunidad dentro de la música en muy poco tiempo. Desde participar en el Orgullo de Madrid, hasta subir al escenario con Bad Bunny, su imagen ya no es desconocida para el mundo y su voz ha ganado mucha relevancia dentro de la lucha del colectivo LGTBI+.

Esta figura de la música urbana suele utilizar sus redes sociales denunciar y opinar sobre diversos temas que rodean al colectivo. En esta ocasión realizó un descargo a través de Twitter, contra la revista Glamour por publicar en la foto de portada una fotografía con la que ella no se sentía cómoda y le producía disforia, pese a haberlo comunicado a la producción. Pese a que admitió que habló desde el corazón y llamó a su público a leerla, no dejó de expresar su molestia y decidió hacer un llamado a la reflexión sobre cómo las personas cis desean controlar la narrativa trans y llegan con estereotipos a la hora de querer "llenar un hueco de diversidad".

"Hoy quiero hablar de cómo las personas cis buscan controlar la narrativa e imagen del movimiento trans para perpetuar estereotipos y violencia. Las fotos que utilizan en esta publicación NO son fotos con las que esté cómoda, lo expresé con mucha antelación y decidieron ignorarme", publicó en Twitter y manifestó que pese a que se lo había comunicado a la producción, estos decidieron ignorar su queja.

En el texto que compartió en su cuenta, expresa la pena que le genera haber tenido "fotografías preciosas" con las que se sentía más cómoda y nunca se conocerán por la decisión de alguien ante la que ella tuvo que callar: "Es muy penoso, pues considero que habían fotos preciosas que no verán porque alguien decidió que estas eran las que iban a ser y yo me tenía que callar la boca y aceptar. Alguien que no es cuir, no es trans y de seguro no entiende todas las intersecciones que mi identidad supone", confesó.

Luego, tras haber considerado "penoso" la cuestión de haber manifestado su inconformidad y haber sido ignorada, expresó su opinión sobre los estereotipos que existen en los medios cuando se quiere llenar un "hueco de diversidad" sin contemplar como realmente se siente la persona. Pese a su queja, no dejó de agradecer a la periodista que le realizó la entrevista quien la entrevistó con mucho "amor y tacto" y también se mostró agradecida con la producción que quizás "nada tuvo que ver" con la decisión final.

La entrada del productor de moda fue un antes y un después en su carrera y para el colectivo. Además, de ser pionera y ser la primera mujer trans dentro del Top 50 de Spotify de la historia, lo cierto es que se ha vuelto ejemplo para muchos músicos de la comunidad que no han podido llegar por la falta de oportunidades y espacio para personas LGTBI+, es por ello que desde aquella canción salió a la luz, se le han presentado un sinnúmero de oportunidades, pese a que ya hacía música por su cuenta.

Sin ir más lejos, la semana pasada participó del concierto de Bad Bunny en el Coliseo de Puerto Rico, su país natal y cantó junto al referente número uno de la música urbana del mundo representando la bandera multicolor. Además, luego de haber colaborado publicó en un cuenta de Insagram un sentido mensaje de agradecimiento al rapero por "brindar ese espacio para representar a la comunidad".

la fama que se ha ganado se traduce en las numerosas invitaciones a cantar en diversos puntos del mapa mundial como Europa y por supuesto en la capital madrileña. Además, miles de figuras de la industrial del entretenimiento se han acercado a ella y se han pronunciado como fieles seguidores de la rapera como la mismísima Penélope Cruz.