Reclamar una herencia desde el extranjero puede ser un proceso complicado, que requiere la presentación de una serie de documentos y el cumplimiento de normativas específicas. Sin embargo con los conocimientos necesarios ,como la documentación necesaria, la legislación aplicable y los impuestos que pueden surgir, y la asesoría de profesionales se puede llevar a cabo con éxito este proceso.
Para reclamar una herencia internacional, se necesitan varios documentos esenciales:
En el caso de la Unión Europea, el Reglamento UE 650/2012 permite a los europeos planificar su sucesión con más libertad, permitiendo elegir entre la ley de su país de residencia o la de su país de origen. El certificado sucesorio europeo también facilita la tramitación de herencias transfronterizas. Normalmente, los tribunales del último país de la UE donde residió el fallecido serán los responsables de ejecutar la herencia, salvo que se haya elegido otra jurisdicción.
Los impuestos varían en función de la residencia de los herederos y el lugar donde se encuentran los bienes. Si el heredero reside en España, debe pagar el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, incluso si hereda bienes en el extranjero. Si el heredero no reside en España pero hereda bienes en el país, también se aplican impuestos locales. Los impuestos pueden ser mínimos o inexistentes dependiendo del grado de parentesco.
Existen diferentes sistemas sucesorios en el mundo, como el Derecho anglosajón, caracterizado por la ausencia de legítimas y la falta de intervención notarial, y el Derecho civil continental, basado en las legítimas, donde se incluye España. Esta diversidad puede complicar un tanto todo el proceso, por lo que es importante contar con asesoramiento especializado.
Además, también esencial conocer el plazo para reclamar una herencia, ya que varía según la legislación de cada país. Si no se realiza dicha reclamación dentro del tiempo establecido, los bienes pueden pasar a manos de otras personas o entidades.
Dada la complejidad de las herencias internacionales, se recomienda encarecidamente contar con la asesoría de un abogado especializado en derecho internacional y sucesorio para facilitar el proceso y garantizar que se cumplan todos los requisitos legales.