Es frecuente que en algún momento de nuestra vida nos planteemos vender nuestro coche para adquirir uno nuevo. El Reglamento General de Vehículos es muy claro a este respecto: si logramos cerrar el trato estamos obligados a informar a la DGT de la venta, un escenario similar al del traspaso del vehículo. Cuando un coche ya no es nuestro, siempre hay que proporcionar la información a Tráfico para evitar cualquier problema o infracción de la otra parte.
La propia DGT recomienda notificar la venta en el mismo momento de realizarla, sin esperar a que el otro conductor cambie la titularidad del coche. Tiene sentido que proporcionemos esta información rápidamente, ya que cualquier multa por radar, pago del seguro o notificación de la ITV nos llegará a nosotros si no hemos informado del cambio a tiempo. Es una forma de curarnos en salud y ahorrarnos preocupaciones.
Cualquier vehículo que pongamos a la venta debe encontrarse libre de cargas, estar en situación de alta administrativa y con el pago del impuesto de circulación al día.
El vendedor tiene hasta 10 días de plazo para comunicar que el vehículo ya no le pertenece, y siempre lo hará después de haber firmado el contrato de compraventa. Esta notificación podemos realizarla antes de recibir la transferencia bancaria por el importe acordado, no es necesario esperar. El proceso beneficia a ambas partes, ya que el comprador no podrá conseguir el permiso de circulación de su nuevo vehículo hasta que no se haya realizado correctamente el cambio de titularidad.
Presencialmente, en una jefatura provincial de Tráfico.
Completa el formulario oficial de comunicación de venta que te proporcionarán en la oficina y solicita cita previa, Tendrás que presentar el documento Nacional de Identidad (DNI) o NIE del vendedor y del comprador, el contrato de compraventa y la documentación técnica del vehículo y abonar la tasa 4.1. Una vez procesada la comunicación, recibirás un justificante de la operación.
Por internet:
Mediante la aplicación móvil de la DGT: