Aplicar una serie de consejos para ahorrar energía en casa, es tan beneficioso para el medioambiente como para tu cartera. El consumo energético ha aumentado de forma desmedida, en muchos casos porque no somos realmente conscientes del gasto que suponen algunos de nuestros hábitos. Si ha llegado el momento de hacer las maletas, dejar nuestra vivienda habitual y marcharnos a desconectar, debes conocer algunos trucos para ahorrar energía en tu vivienda cuando te vayas de vacaciones.
Aunque estés fuera y no hagas uso activo de los electrodomésticos, estos siguen funcionando; es decir, siguen tirando de electricidad. Por tanto, no te extrañes cuando te llegue la factura de la luz y veas que se ha mantenido casi en el mismo importe que cuando hacías pleno uso de la lavadora, la televisión o planchabas la ropa a cualquier hora.
A la hora de tomar determinadas medidas de ahorro no es lo mismo viajar un fin de semana, una semana o irte de vacaciones un mes, por lo que es un factor a tener en cuenta.
La lista de aparatos a tener en cuenta puede ser realmente muy larga: microondas, horno, licuadora, cafetera eléctrica… y en el salón: la tele, el router, cargadores de teléfonos y portátiles… Todos son dispositivos devoradores de electricidad incluso cuando no se están usando. Los hacen así para facilitarnos la vida, pero si no vamos a estar en casa no compensa mantenerlos conectados. Es el famoso consumo fantasma y puede suponer entre el 7 y el 11% del consumo energético total de la vivienda. Un derroche silencioso que no para por vacaciones.
Desconecta la nevera
Solo hace falta darse una vuelta por la vivienda para comprobar que muchos aparatos eléctricos siguen funcionando, aunque tú no estés. El más importante es el frigorífico, que consume más del 30% de la electricidad de tu casa.
Si vas a estar fuera más de 3 días puedes darle vacaciones a la nevera. Desenchufándola conseguirás un consumo cero, pero ¡atención!, perderás todos los alimentos perecederos que haya dentro. Solo tienes que planificar las compras y comidas de tu última semana para dejarlo lo más vacío posible. Recuerda que si desenchufas el frigorífico es imprescindible que lo dejes con las puertas abiertas para evitar la aparición de moho y malos olores.
También hay que saber que, en muchas ocasiones, vaciar el frigo y desenchufarlo es una aventura poco recomendable. Si tienes mucha comida, y vaciarlo no es una opción, aún puedes ahorrar. Tanto la nevera como el congelador son más eficientes desde el punto de vista energético cuando están casi llenos. Por ello, bastará con completar los huecos con tuppers llenos de agua y poner el termostato en la posición de menos frío posible.
Como no vas a abrir la puerta en muchos días, el frío se conservará dentro manteniendo los alimentos bien frescos. Así, conservarás igualmente los alimentos y lograrás ahorrar alrededor de un 6% de energía por cada grado que subas.
Desconecta el termo eléctrico
Si el agua caliente procede de un calentador eléctrico, con su apagado puedes llegar a ahorrar hasta un 25% del consumo de tu vivienda durante las vacaciones.
El consumo eléctrico del 'standby'
¿Apagas todas las luces de la casa, pero dejas encendido el piloto rojo de la tele? Esas lucecitas rojas que te rodean de noche son una indicación de que tus dispositivos están listos para encenderse rápidamente… y también de que siguen consumiendo. Date una buena vuelta por todas las habitaciones y hazlas desaparecer antes de salir. Es un gasto totalmente innecesario. Estos electrodomésticos en modo de espera suponen entre el 7 y el 11% del total de toda la luz que consumes al año.
Además de hacer desaparecer todas las lucecitas antes de salir por la puerta, tienes que saber que hay electrodomésticos que siguen consumiendo energía cuando están desactivados. Esto es porque permanecen conectados a la red. Por ejemplo, tu ordenador, el aire acondicionado, los cargadores de móvil, tablets, la consola de juegos… ¡incluso los cepillos de dientes recargables!