Sorpresa es lo que se han llevado los vecinos de buena parte de la costa mediterránea. Desde Castellón hasta Murcia, pasando por Valencia y llegando incluso hasta Albacete. Allí pudieron divisarse fogonazos en el cielo, que nadie entendía de dónde podían venir.
Una gran bola de fuego atravesó el cielo y dio qué pensar. "Fue un susto. Pensábamos que era un OVNI o algo de eso". La idea de que los extraterrestres nos haga una visita recayó en la mente de muchos: "Quizás vienen de otro planeta. Hay muchas películas y la realidad supera la ficción"
Podría ser un asteroide o un meteorito. Pero para decepción de algunos, los expertos despejan las dudas. Pere Bray, astrónomo de la Universidad de Valencia, afirma que "se trataba de un satélite de la flota de Starlink, de SpaceX", fundada por Elon Musk. La compañía los lanzó al espacio para proporcionar Internet, pero no contaron con una tormenta solar que derribó gran parte de ellos, haciendo que se hayan perdido 40 satélites. "Por los rozamientos con la atmósfera se calientan mucho, se queman y acaban desintegrándose", apunta Bray.
Y aunque suene todo muy lejano y de ciencia ficción, "a priori no hay por qué preocuparse", asegura Amadeo Aznar, del Grupo de Observatorios APT. "Se ve cómo va perdiendo material, cómo e va desintegrando". Ahora, algunos de esos satélites vagan sin rumbo, convertidos en basura espacial.