Hace unos 800 millones de años, la Tierra fue bombardeada por fragmentos de meteoritos pertenecientes a un enorme asteroide desintegrado de 100 km de ancho. Se cree que la fuerza de impacto colectiva fue de 30 a 60 veces más que el impacto de Chicxulub: el asteroide que golpeó nuestro planeta en la costa de México y aniquiló a los dinosaurios al final del Cretáceo.

Ninguna huella tiene la Tierra de esos impactosNature Communications elaborado por investigadores japoneses de la Universidad de Osaka describen la edad y la formación de 59 cráteres lunares con un diámetro mayor de 20 kilómetros. Los eventos de extinción masiva se han producido al menos cinco veces (los llamados cinco grandes eventos) y los impactos extraterrestres se consideran la acusa de gran parte de ellos.

Los cráteres gigantescos de la Luna fueron fotografiados por la cámara a bordo de la nave espacial orbitador lunar Kaguya, construida por la Agencia Espacial Japonesa (JAXA). Pero para determinar su edad, los investigadores dirigidos por Kentaro Terada , profesor del Departamento de Ciencias de la Tierra y el Espacio de la Universidad de Osaka, tuvieron que examinar la densidad de los cráteres relativamente pequeños en la eyección de los cráteres más grandes.

Terada y su equipo se pusieron manos a la obra y han acabado determinando que la lluvia de meteoritos fue generada por la colisión de dos grandes asteroides con un diámetro mayor a 100 kilómetros. Para hacerse una idea del brutal impacto y las consecuencias solo hay que pensar que el devastador impacto de Chicxulub que llevó a la extinción del 75% de todas las especies animales y vegetales hace más de 65 millones de años fue generada por un asteroide de 10 a 15 km de diámetro. Hablamos del choque de dos con un tamaño que los multiplicaba por diez. Algunos de estos fragmentos cayeron en la Tierra y la Luna, pero también en otros planetas terrestres del sistema solar, así como en el propio Sol. Otros fragmentos se perdieron en el cinturón de asteroides.

Después de que esta lluvia masiva de meteoritos bombardeara el sistema Tierra-Luna, hace más de 700 millones de años, el planeta se convirtió en una bola de nieve. Prácticamente toda la superficie de la Tierra se vio envuelta en capas de hielo polar y los océanos se volvieron fangosos. Las erupciones volcánicas masivas arrojaron tantos gases de efecto invernadero a la atmósfera que la Tierra se volvió tan cálida que los océanos estaban cerca de su punto de ebullición. Luego, los cielos oscurecidos por la ceniza activaron el enfriamiento global nuevamente, y la Tierra volvió a su forma de bola de nieve una vez más.

Es bastante difícil imaginar un momento más inapropiado para los pequeños organismos unicelulares y multicelulares que surgieron. Pero por extraño que parezca, este difícil período geológico, conocido como el Criogénico, coincide con el momento en que evolucionó la compleja vida animal. De la alternancia de hielo y calor surgieron las primeras criaturas complejas que eventualmente evolucionarían.

El estudio sugiere que los meteoritos depositaron 100.000 millones de toneladas de fósforo en la Tierra. "Nos alegra que esta investigación conduzca al avance de la ciencia de la Tierra desde el punto de vista de que los cambios ambientales de hace 800 millones de años pueden haber sido causados por factores extraterrestres". El estudio así lo sugiere al menos, aunque la Tierra no tenga rastro de ella lluvia de meteoros bestial. A la espera del Dios del caos, que según la NASA llegará el 13 de abril de 2029, que solo tiene una posibilidad entre cien mil de tocar la Tierra lo que provocaría una explosión 15.000 veces superior a la bomba de Hiroshima, la polémica está servida.