Bañistas, surfistas… Ojito este verano: el confinamiento le ha sentado fenomenal a los tiburones. Tanto, que se están acercando a nuestras costas esta primavera para ocupar el espacio que hemos dejado libre. Además, parece que la borrasca Gloria que afectó a zonas del litoral mediterráneo este enero ha contribuido a regalarles más alimento en la Costa Brava, en Granada y en las playas del Levante español.
El tiburón peregrino no es que sea muy frecuente, a menos que sepamos, cerca de la costa española. Abunda cerca de Irlanda, pero también en el Mediterráneo, o solía hacerlo, como otras (aproximadamente) 60 especies de tiburones y rayas, pero la pesca y la contaminación de su hábitat han reducido su población y es rarísimo que se dejen ver. Sin embargo, van varias veces ya que se han avistado este último mes.
Como ha ocurrido también con los delfines y ballenas, que de repente se asoman más cerca que nunca de los puertos del Mediterráneo, los tiburones están paseando sus aletas muy próximos a la orilla. Así veía los cetáceos este dron de la comunidad ‘Drone-Catalunya’ hace unas semanas.
Coincide con el paso de estas zonas a la fase 2, en la que se permite el baño, por lo que habrá que mantener los ojos más abiertos de lo que acostumbramos. Pero la recuperación de esta especie, que los científicos calculan que no debe alejarse demasiado de la extinción por su escasa población, es una buena noticia.
Se ha avistado en la playa de Calahonda (Granada) y en las aguas del entorno de Girona entre las Islas Medas y la Escala. La ausencia de embarcaciones de recreo y la reducción de embarcaciones de pesca hacen que el silencio se haya impuesto cerca de la línea de costa, lo cual facilita su reproducción y su comunicación.
En cuanto al efecto que ha tenido la borrasca Gloria, todavía se investiga, pero parece claro que observaremos eventos derivados de su temporal durante años. Se trató de uno de los episodios que más precipitación ha dejado en tres días consecutivos en zonas del litoral mediterráneo, principalmente de Alicante y Valencia. Y no olvidemos que también trajo nevadas a zonas inusuales, granizo, viento… Fue un temporal para el recuerdo sin duda.
Es por ello que no sorprende que la presencia de especies pueda estar ligada a este episodio. Varios ríos catalanes se desbordaron y el aporte de agua dulce al mar ha supuesto un aumento del plancton y otras especies que forman parte de la dieta del tiburón peregrino, como los pequeños peces que captura sin esfuerzo con su enorme boca a su paso. Si nunca has visto un peregrino en acción, te dejamos el siguiente vídeo para que te hagas una idea que difundió el canal de la revista científica ‘Science’ en 2018.