Los investigadores, más de 80, han elaborado el primer mapa genético del déficit de atención e hiperactividad en más de 50.000 personas de diferentes países de Europa, Estados Unidos, Canadá y China. Para ello han analizado alrededor de 10 millones de variantes genéticas.
De los 50.000 participantes en el estudio, que publica la revista Nature Genetics, 20.000 de las personas analizadas están diagnosticadas con TDAH y los investigadores determinaron al menos 12 variantes involucradas y que indican una predisposición a sufrir el trastorno.
Las 12 variaciones genéticas identificadas como propias del TDAH son muy comunes en la población y ese era uno de los objetivos del estudio en el que han participado investigadores de la Universidad de Barcelona (UB), del Hospital Vall d'Hebron, del Hospital Mutua Terrassa y del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). Buscar sin discriminar entre variaciones comunes, no en las raras.
Uno de los genes más directamente relacionados con el TDAH es el FOXP2, determinante en el desarrollo del lenguaje humano y con un papel importante en las conexiones neuronales y el aprendizaje. Otro, el DUSP6, está implicado en la dopamina, el sistema de recompensa cerebral que está alterado en pruebas de imagen en personas con TDAH.
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad, que es uno de los síndromes psiquiátricos más comunes en la infancia y adolescencia, afecta a cerca del 5 % de los niños y al 2,5 % de los adultos.