Acabamos de cerrar los meses de verano más cálidos de la historia y lógicamente iban a traer sus consecuencias. La escasez de lluvias que hemos experimentado los últimos meses y las temperaturas por encima del promedio han propiciado, junto con episodios que se repiten desde hace años, que Europa se este enfrentando a una sequía generalizada sin precedentes. Ha llegado hasta tal punto que el centro Copernicus ya ha alertado de que se trata de una "de las mayores amenazas del futuro". Te contamos cómo afectará este déficit en nuestro país.
Europa se enfrenta a numerosos problemas medioambientales como la contaminación de sus mares por residuos plásticos, como se viene advirtiendo en la cuenca del Mediterráneo. Pero su quebradero de cabeza no acaba ahí. El Servicio de Monitorización de la Tierra de Copernicus (CLMS) ya ha alertado de un nuevo desafío al que debemos hacer frente. Es hora de que nos preocupemos por la sequía porque cada vez va a más y se están alcanzando cifras históricas de déficit de humedad. Sufrimos condiciones de "sequía severa" que nos sitúan en un panorama aún más desolador, detalla Copernicus.
Por primera vez en la historia hemos registrado la cifra más baja de humedad en el noroeste de Europa (Bélgica, Países Bajos y Sur de Inglaterra) y en zonas de Francia y España. Esto es debido a la conjunción de dos fenómenos: las olas de calor que hemos vivido al final de la primavera y durante el verano de 2018 y 2019, -siendo el último el más caluroso del Hemisferio Norte-, y los bajos niveles de precipitación. Las altas temperaturas que hemos experimentado han favorecido la evaporación del suelo y la salvación no llega a nuestros campos.
En Francia el déficit de lluvia en verano está entre el 30 y 60% en zonas del centro, noreste y sureste, según indica la Meteo France. En París, concretamente, no llueve desde el 18 de agosto y sufre una de las sequías más vertiginosas, eso por no hablar del récord de calor que se batió en la ciudad el pasado julio, de 42,6ºC. Asimismo, el mapa de sequías actuales en Europa elaborado por Copernicus pone de relieve el déficit de humedad que vive Francia. A pesar de tener vegetación, esta carencia de agua no se está revirtiendo y ya se sitúa como uno de los países que alcanzan el ranking de riesgo extremo.
*Imagen: Mapa de las sequías actuales en Europa, destacando en rojo la alerta de la falta de humedad / Copernicus
Lo mismo sucede en nuestro país. El estado de los embalses en España roza cifras muy preocupantes que han llevado a realizar los primeros cortes de agua en algunas provincias, como Valencia del Ventoso (Extremadura). Las cuencas de nuestros ríos están cada vez más secas y muchas de ellos no llegan ni al 40% de su capacidad. Uno de los ejemplos es la cuenca hidrográfica del río Segura, que no alcanza ni el 28% de su capacidad total. De hecho, Copernicus ha anunciado que la humedad del suelo ha sido menor que el año pasado, especialmente en el entorno del Ebro y la provincia de Extremadura.
Europa ya se enfrenta a una nueva amenaza que afecta de manera más drástica a España y Francia. Los frentes atlánticos que hemos experimentado este mes y la llegada de una nueva DANA (depresión aislada en niveles altos) no serán suficientes para saciar nuestros embalses, ya que buena parte de la precipitación no llega a los pantanos bien por la evaporación o por la absorción del suelo.