Ni plásticos, ni medusas: qué son las salpas, los animales de aspecto alienígena que han invadido Málaga

Una plaga de un animal transparente y gelatinoso sorprendió el fin de semana a los bañistas en las playas de Málaga y en la Costa Granadina. Parecen trozos de plástico y algunos, acostumbrados a las medusas en esta zona, temían que picasen. Pero este invertebrado tan curioso es inofensivo y su comportamiento es de lo más interesante. Te presentamos a los sálpidos, el ser vivo que se clona cuando hay demasiada comida.

Son animales marinos, de la familia de los tunicados de la clase Thaliacea y son hermafroditas. Tienen forma de barril y únicamente se ve su aparato digestivo, que es rojo, ya que el resto de su cuerpo está recubierto por una celulosa que deja ver su interior.

Pueden ir por libre o en colonias masivas y, más que una plaga, su aparición en las playas de Málaga y Granada se debe a su 'bloom' o floración, por el exceso de fitoplancton, del que se alimentan. Las sarpas, cuando existe abundancia de este organismo, se clonan para recogerlo y crecen a un ritmo muy acelerado, eliminándolo rápidamente y filtrando el agua a través de dos orificios. Un solo ejemplar puede producir cientos. A pesar de tener un papel importante en nuestros océanos porque captan el CO² —contenido en el fitoplancton—, perjudican a otras especies que no se multiplican a tanta velocidad y por tanto acaban con el alimento, alterando el ecosistema en el océano Antártico, el norte del Pacífico y en zonas del Mediterráneo, donde suelen habitar.

No son habituales en nuestras aguas en esta época, pero sí pueden serlo durante el otoño o el invierno, después de episodios de viento intenso y oleaje, cuando son devueltas rápidamente al mar y pasan desapercibidas por la ausencia de bañistas. En pleno junio, quienes las ven en persona comparten fotos en las redes del curioso visitante que tanta expectación está causando.

Este animal cristalino que se desplaza bombeando agua o dejándose llevar por la corriente puede haber llegado por el temporal de levante, aunque aún se investiga el motivo. Aunque no existe riesgo de que pique a nadie, los trabajos para retirarlo de la costa ya se han iniciado.