La realidad hay veces que supera a la ficción. En Rumanía, recientemente, un esquiador disfrutaba deslizándose pista abajo cuando empezó a escuchar gritos desde un telesilla: “¡Más rápido! ¡No mires atrás!”, le decía. Un enorme oso le perseguía como tratando de jugar. Lo hizo durante un buen rato.
La escena es entre divertida y aterradora. Un oso aparentemente adulto persigue a un esquiador por la pista Clăbucet en la estación de esquí de Predeal, en Rumanía. Quienes ven la escena desde el telesilla le avisan como pueden al tiempo que uno de ellos aleta a las autoridades.
Los osos no son una novedad en las cordilleras de Rumanía. Alrededor de la mitad de las poblaciones de europea viven en este país, que cuenta además con varios santuarios. Uno de ellos se encuentra en la montaña de Brasov, donde se ubica también la estación de Predeal.
Según han explicado las autoridades a los medios locales, el oso realizó una parada para hurgar en una papelera que le habría dado algo de margen al esquiador. En cuanto a los motivos de la persecución, se habría debido a mera curiosidad del oso al ver a una persona descendiendo tan rápido por la montaña.
Entre los esquiadores que lograron captar el momento está David Creta, que ha publicado el siguiente vídeo. “Finalmente, el esquiador tiró su mochila para interrumpir al oso, que se paró a inspeccionarla. El esquiador está a salvo”, escribe en la descripción.