El pasado 23 de abril, cuando la nave Crew Dragon de SpaceX se dirigía a la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés), un ‘objeto desconocido’ se cruzó en su camino. Desde las oficinas de la NASA se ordenó a la tripulación que cubriera las ventanas con mantas, se pusieran los trajes de vuelo y se sentaran en sus asientos en caso de que hubiera un impacto que causara una pérdida de presión de aire. Por suerte los cuatro astronautas pudieron llegar sanos y salvos a su destino.
El sudor debió de correr por la frente de los cuatro astronautas a bordo del Crew Dragon "Endeavour". En el vídeo del seguimiento desde el lanzamiento en Florida hasta el acople a la ISS se puede ver el momento en el que la cápsula se separa de la segunda etapa del cohete Falcon 9, al mismo tiempo que el objeto desconocido pasa por delante.
*Momento en que un objeto pasa cerca de la nave Crew Dragon sin impactar / NASA / SpaceX
El Control de Misión de la NASA observaba el objeto de cerca y apunta a que se trataba de “una pieza desconocida de escombros orbitales (basura espacial)”, han comunicado desde la agencia espacial.
En el siguiente vídeo se ve el momento en que Sarah Gilles, miembro de la NASA, informa a la tripulación del posible riesgo de que el objeto impacte, ante la atenta mirada del resto del esquipo de ingenieros. “El máximo acercamiento puede producirse a las 17:43 GMT”, dice, “creemos que el objeto está más lejos de lo que habíamos anticipado. Menor riesgo de posible conjunción”, tranquiliza después a los astronautas del Crew Dragon.