La costa este de los Estados Unidos podría verse invadida por millones de arañas voladoras, del tamaño de una mano, según un estudio científico, llevado a cabo por la Universidad de Georgia y publicado en la revista Physiological Entomology.
Según la investigación, esta especie de araña, conocida como Joro -Nephila clavata-, tiene el tamaño de la palma de la mano -unos siete centímetros y medio- y ya invadió el pasado mes de septiembre la parte norte del estado de Georgia.
Las arañas de rayas amarillas brillantes, según apuntan los científicos, habrían llegado desde el este de Asia y tendrían una resistencia especial al frío. Asimismo, el estudio revela que las crías Joro se dispersan creando paracaídas de telaraña, para volar hasta 161 kilómetros, lo cual podría llevarlas de manera desproporcionada y peligrosa a la costa este estadounidense. Una información que recoge Live Science.
La araña Joro habría llegado a Georgia, dentro de un contenedor de mercancías en 2014. Desde entonces se habría reproducido de manera desmesurada en el estado, llegando su población a cubrir casi por completo porches, líneas eléctricas buzones y huertos.
El mismo estudio desveló que la excesiva población de arañas no tienen por qué ser perjudicial. De hecho, pueden convertirse en fuente de alimento adicional para depredadores nativos, como algunas aves. "La gente debería tratar de aprender a vivir con ellos", porque no parece que se vayan a ir. "Si literalmente se interponen en tu camino, puedo ver cómo quitar una telaraña y moverlos hacia un lado, pero volverán el próximo año", explicó Andy Davis, investigador de la Universidad de Georgia.
Las arañas son relativamente inofensivas para las personas y las mascotas. Las Joro no muerden a menos que las acorralen, y sus colmillos a menudo no son lo suficientemente grandes como para hacer daño a los humanos.