Llegan unas fechas señaladas y va siendo hora de decorar la casa. Pero, cuidado, la planta más comprada en esta época puede traerle problemas a tu mascota. ¿Tienes gato? Mejor evita las flores de Pascua, son tóxicas para ellos.
Da igual si es por contacto ocular, cutáneo o si la ingieren. La flor de Pascua (Euphorbia pulcherrima) contiene un “líquido lechoso irritante que circula por los tallos y membranas”, indican desde el Centro Veterinario Veterinos. No es letal, pero le causará el peor rato de su vida (y a ti).
Los síntomas van desde los vómitos y diarreas, hasta alteraciones al tragar e inflamación de los órganos expuestos (glositis, faringitis, etc.), unido a una molesta hipersalivación. Al contacto con los ojos, esta flor navideña puede generar úlceras, conjuntivitis y dermatitis en la piel.
Y no es la única planta tóxica típica de estas fechas. El acebo, también muy frecuente de la Navidad, puede traer problemas gastrointestinales a tu mascota, sea perro o gato. Es raro que ingieran sus hojas porque pinchan, en cambio sus pequeños frutos rojos llaman la atención de los animales, por eso no se recomienda tenerlas en casa o el jardín a su alcance. Lo síntomas varían entre vómitos y diarrea y un aumento de la salivación.
Y una última planta que deberías tachar de tu lista de decorativos navideños es el muérdago. Se dice que trae buena suerte y felicidad, y la tradición es colocarlo en esta época del año para que los enamorados se besen bajo sus hojas. Sin embargo, poco importa todo esto si tenemos mascota. Contiene una proteína tóxica llamada viscotoxina que puede producir desde desórdenes gastrointestinales hasta daños cardiovasculares como la disnea (dificultad respiratoria).