Hace poco conocimos una fotografía que la NASA se guardaba en la recámara para Halloween desde 2014, en la que el Sol se mostraba como una calabaza ardiente gracias a las áreas más activas en su superficie y una mezcla de luces ultravioleta. La siguiente imagen que nos deja el espacio para la fiesta del terror no se ha hecho esperar, y esta podrá gustarte incluso más. Se trata de dos galaxias, colisionando… Y fantasmales.
Puede que te parezca una broma propia de Cuarto Milenio, pero las imágenes que la agencia espacial difunde esta semana con motivo de la llegada de Halloween son reales. El satélite Hubble de la NASA capturó esta colisión entre dos galaxias en el espacio, de mismo tamaño, este mismo año, en 2019. Residen, ha explicado, "a 704 millones de años luz de la Tierra".
La NASA ha compartido a través de Facebook el siguiente vídeo, que enuncia "un recordatorio de que cuando el Hubble mira al vacío del espacio, a veces el abismo mira de vuelta". La curiosa y halloween-esca formación recibe el nombre de AM 2026-424 al chocarse mediante un "baile de destrucción".
Según desarrolla la agencia estadounidense, la gravedad atrae a ambos, lo cual es un "preludio del destino de nuestra propia galaxia", que podría sufrir el mismo devenir en 4 billones de años con la galaxia de Andrómeda dando lugar a una nueva compuesta por los restos. Por suerte, no estaremos aquí para vivirlo.