Descubren cuatro cepas bacterianas viviendo en la Estación Espacial Internacional: tres son desconocidas

  • De las cuatro cepas bacterianas detectadas, tres son desconocidas para la Ciencia

  • Los investigadores apuntan que habrían surgido tras el cultivo de plantas en la Estación Espacial Internacional

  • El hallazgo es prometedor para el estudio de la vida en condiciones extremas

En ocasiones, la vida puede abrirse paso en las condiciones y los lugares más insospechados, como por ejemplo, toda una Estación Espacial Internacional, donde ahora un equipo de investigadores de la India y Estados Unidos, el cual trabaja en estrecha colaboración con la NASA, ha descubierto la presencia de cuatro cepas de bacterias.

El relevante hallazgo es todavía más importante e insólito porque de esas cuatro cepas, tres son completamente desconocidas para la Ciencia.

Según informa ZME Science, citando el informe científico publicado en Frontiers, espacio dedicado a la difusión de artículos revisados por pares y de acceso abierto, estas cepas se instalaron en distintos puntos de la Estación Espacial Internacional, distribuyéndose por el panel superior de un laboratorio de investigación, la propia cúpula de la estación, una mesa del comedor de la tripulación y un antiguo filtro Hepa que fue devuelto a la Tierra en 2011.

Todas ellas, según indican, estarían relacionadas con los procesos de fijación de nitrógeno, el crecimiento de las plantas y la lucha contra los patógenos de estas. Por eso, la explicación más plausible que encuentran es que probablemente llegasen a la Estación Espacial Internacional cuando los miembros de la tripulación empezaron precisamente a poner ciertos cultivos en marcha con el objetivo de complementar su dieta.

Así, dado que las plantas requieren normalmente de las comunidades bacterianas para que realicen ciertas funciones esenciales para ellas, este hecho concreto, en sí mismo, no es tan sorprendente. Lo que sí lo es absolutamente es que de las cuatro cepas solo una, perteneciente a la especie ‘Methylorubrum rhodesianum’, ha sido identificada como conocida. Las otras tres, sin embargo, fueron secuenciadas genéticamente, lo que llevó a la conclusión de que pertenecen a nuevas especies.

El hallazgo, clave para el estudio de la vida en condiciones inusuales

Desconocidas para los investigadores, temporalmente se las ha denominado IF7SW-B2T, IIF1SW-B5, y IIF4SW-B5, y su gran relevancia radica precisamente en estudiarlas y conocerlas para saber qué elementos genéticos son los que las hacen tan adecuadas para la vida en condiciones tan inusuales como las existentes a bordo de la Estación Espacial Internacional; para seguir avanzando en la conquista de nuevos horizontes en el espacio.

"Para cultivar plantas en lugares extremos donde los recursos son mínimos, el aislamiento de nuevos microbios que ayuden a promover el crecimiento de las plantas en condiciones estresantes es esencial", explican en un comunicado a los medios Kasthuri Venkateswaran y Nitin Kumar Singh, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA y dos miembros del equipo involucrado en la investigación.

Los estudios de secuenciación del genoma completo de las tres cepas, señalan, podría “ayudar aún más en la identificación de determinantes genéticos que podrían ser potencialmente responsables de promover el crecimiento de las plantas en condiciones de microgravedad y contribuir al desarrollo de cultivos de plantas autosostenibles para misiones espaciales a largo plazo en el futuro".

Prometedoras para el estudio de los cultivos en el espacio

De las tres, además, se muestran esperanzados al afirmar que al menos una de ellas, la que han llamado IF7SW-B2T, es prometedora para esa búsqueda de genes involucrados en el crecimiento de las plantas.

En este sentido, señalan que apenas se está empezando a comprender la gran cantidad de bacterias a bordo de la Estación, indicando que recoger las muestras no es difícil, pero sí llevarlas hasta la Tierra para su examen.

Por el momento, de hecho, se han tomado 1.000 muestras, pero están a la espera del transporte a nuestro planeta.