Descubren la más antigua fábrica de extracción de sal de Gran Bretaña de hace 6.000 años
La salina data del 3800 a.C., en el neolítico, y supone una revolución en el conocimiento que se tenía de la economía y la tecnología prehistórica británica
Significa que los pobladores británicos estaban 2.400 años más avanzados de lo que se pensaba y se cree que la técnica fue traída por migrantes franceses
El yacimiento ha sido encontrado por arqueólogos en una granja en el contado de Yorkshire, en el este, a cuatro kilómetros del Mar del Norte
Los neolíticos británicos estaban más avanzados de lo que hasta ahora se había pensado. Esta es la conclusión de los arqueólogos que han descubierto un complejo para la fabricación de sal que data del año 3800 a.C. y tiene 5.800 años de antigüedad. Creen que este hallazgo puede revolucionar el conocimiento que se tiene de la economía prehistórica británica en cuanto a la subsistencia, a la tecnología y al comercio. Sugiere que la economía en el neolítico era mucho más sofisticada de lo que se pensaba. Adelanta en 2.400 años la fabricación y el almacenamiento de sal de los británicos. En Gran Bretaña se conocen numerosos sitios de trabajo de sal de la edad del bronce, pero el más antiguo era del año 1400 a.C.
Este complejo de fabricación de sal fue descubierto en una granja de Street House, en la localidad de Luftus, en la costa noreste de Inglaterra. Se trata de un yacimiento que el arqueólogo Stephen Sherlock empezó a excavar en los años 80 y donde encontró en 1984 un túmulo y una estructura mortuoria del Neolítico tempano y en 1988 un monumento empalizado del Neolítico tardío. Desde entonces ha desenterrado restos neolíticos y algunos de la etapa anterior del Mesolítico, también en la Edad de Piedra, y posteriores de la Edad del Hierro. También encontró un cementerio anglosajón del siglo VII.
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Han hallado restos de un pozo de almacenamiento de salmuera, tres hornos para hacer sal, briquetas, fragmentos de herramientas de sílex y piedra y cuencos de cerámica. Sherlock, que trabaja con un equipo independiente, hizo la conexión entre los objetos descubiertos en las trincheras y el posible complejo de fabricación de sal. A partir de entonces empezaron a levantar la tierra siguiendo esta línea de investigación. Por ahora todos los hallazgos y todas las comprobaciones indican que Sherlock estaba en lo cierto. Científicos de la Universidad de Sheffield han comprobado las huellas de radiocarbono de los utensilios desenterrados y han confirmado que era del 3.800 a.C.
La granja de Street House
El neolítico es la última etapa de la Edad de Piedra, duró del año 10.000 al 3.000 a.C., antes de la Edad del Cobre, del Bronce y del Hierro. El neolítico se caracterizó por el paso del nomadismo al sedentarismo y las primeras formaciones de aldeas, por la fabricación de cerámica y el pulido de la piedra y la invención de la rueda. La granja del Street House está a cuatro kilómetros de costa, del Mar del Norte. Según la investigación del doctor Sherlock, recogían el agua del mar y dejaban que se evaporara y quedara una solución salina. Este proceso podía ser llevado a cabo en la localidad costera de Skinningrove ya que es el punto con un más fácil acceso a la playa de la zona.
Luego la concentración salina que quedaba o salmuera era transportaba hasta el centro de producción a través de conductos de madera y era almacenada en los tanques. La salmuera era extraída de los tanques en recipientes. Las vasijas eran colocadas sobre un marco de madera sostenido por puntales de piedra y cerámica. La madera seguramente había sido humedecida previamente para soportar el calor del fuego. Las vasijas eran calentadas durante horas para acabar de eliminar toda el agua. Hasta que quedaba una especie de pasta o tarta de sal.
Entonces rompían las ollas para obtener la masa de sal y se les daba forma para poder transportarlos. Se cree que todo este proceso podría demorarse unas siete horas. Piensan que el proceso de evaporación de la sal se producía solo en determinadas épocas del año.“En el Neolítico temprano, la sal era un bien escaso, probablemente reservado para ocasiones especiales o para individuos seleccionados, pero el desecho formado por los escombros de este proceso podría ser dado a los animales”, explica Sherlock en la revista ‘Antiquity’.
Los primeros migrantes franceses
Los primeros complejos salinos europeos neolíticos fueron encontrados en los Balcanes, el oeste de Francia y Alemania. Los pobladores prehistóricos de Gran Bretaña allá por el 4000 a.C. se encontraban inmersa en la transición de la caza y la recolección al sedentarismo y la domesticación de plantas y animales. Los habitantes de la costa se volvieron cada vez más dependientes de tener una dieta terrestre. El doctor Sherlock cree que estas técnicas de procesamiento de la sal fueron traídas por migrantes europeos. El análisis de los fragmentos de cerámica de Street House coincide con los encontrados en 2012 en los yacimientos prehistóricos de Couture y Champ Durand, en el oeste de Francia, y que datan de entre 3400 a 2900 a.C.
El yacimiento de Street House es anterior a los de Francia, y posterior a los de los Balcanes y de Polonia. También es posterior a la fábrica de sal de Poiana Slatinei, en Rumanía, del 6000-5500 a.C., la más antigua de Europa y del mundo. “Es evidente que la salina de Street House se remonta a la etapa del cuenco redondeado del Neolítico dentro de la ‘neolitización’, considerada una migración desde el paso de Calais, en el Canal de la Mancha, a las Islas Británicas entre el 4000 y el 3800 a.C. Si bien la salina del 3800-3700 a. C., la tecnología de trabajo de la sal probablemente llegó con estas personas migratorias”, dice Sherlock. La sal era fundamental en las sociedades prehistóricas para preparar y conservar alimentos y pieles y era muy difícil de obtener.
La revolución neolítica
Gran Bretaña inició la transición de los cazadores-recolectores a la agricultura y a los asentamientos en el 5.000 a.C. como parte de la llamada revolución neolítica o “neolitización’, que fue la primera revolución de la agricultura conocida. Se construyeron las primeras aldeas. Se aplicó el riego a la agricultura, se talaron bosques para mejorar las técnicas de cultivos. Se crearon los diferentes roles y las divisiones del trabajo en las ciudades y las primeras formas de comercio.
Este proceso empezó en el 10.000 o 9.000 a.C. como respuesta a la crisis climática tras la última glaciación. Se originó en la antigua Mesopotamia, entre los ríos Tigris y Éufrates, donde hoy se encuentran Irak y Siria. Desde allí se expandió por toda Europa y la isla de Gran Bretaña en los siguientes siglos. Al asentarse, las sociedades pudieron experimentar con las plantas en lo que se conoce como la domesticación de las plantas y también de los animales. En Gran Bretaña, la revolución neolítica llegó de manos de los migrantes franceses y europeos, que se establecieron en la isla. Se han encontrado numerosas estructuras neolíticas para ceremonias religiosas y para el comercio. La más famosa y la más importante es la de Stonehenge. El complejo de fabricación de sal de Street House es dos mil años anterior a los famosos crómlech de Stonehenge.
Acelerar el cambio social y político
“Estos hallazgos son importantes para la comprensión de la dieta neolítica, los métodos de conservación de alimentos y la cría de animales, así como cuestiones más amplias de distribución y valor en la sociedad neolítica británica”, añade Sherlock. Las evidencias de Street House ayudarán a comprender a los prehistoriadores los mecanismos de producción, distribución y consumo de sal, su potencial utilización en el trabajo artesanal y su importancia en el ritual. También el origen de la actividad comercial en Gran Bretaña.
Sugieren que los primeros agricultores de Gran Bretaña pudieron producir muchos más alimentos de lo que se presumía, y que eso habría permitido una expansión de la población más rápida, acelerando así el cambio social y político. Todavía no se ha determinado el alcance total de la producción de sal en el sitio. El estudio geofísico identificó una posible nueva salina más al norte, en este yacimiento. Por tanto, podría aumentar su importancia.