Conducir con calor: programar bien el aire acondicionado y otros consejos para llevarlo mejor
Si no se toman algunas precauciones, nuestro coche se puede averiar con el calor en viajes largos
Es fundamental vigilar la temperatura del motor y parar si se calienta demasiado
Las altas temperaturas de estos días se van a mezclar con las salidas por vacaciones, y este año el coche parece el medio de transporte preferido. Es decir, sí o sí a la mayoría nos tocará conducir con calor. Un incordio que, además, conlleva unos cuantos riesgos: desde el sofoco inevitable hasta posibles averías. La DGT aconseja varias cosas en estos casos.
Pon el coche a punto
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Los primeros días de julio están siendo tórridos en el sur, como corresponde, y aunque algo más llevaderos en el norte, las temperaturas van a subir. Si justo teníamos pensado iniciar nuestras vacaciones, es importante en primer lugar poner el coche a punto. Lo más importante es revisar la presión de los neumáticos, la avería más habitual.
No salgas en las horas de más calor
Otra cosa que podemos hacer, que recomienda la Dirección General de Tráfico en verano, es planificar el viaje antes de nada. Salir por la noche quizá no sea la mejor idea si eres de dormirte en cuanto se pone el sol, pero tampoco es muy aconsejable empezar la travesía a las 3 de la tarde. Procura que sea en las horas de menos calor, es decir, a primerísima hora de la mañana.
Lleva agua y lleva la ropa adecuada
Sé previsor. Con esto nos referimos a: lleva agua para hidratarte, ropa cómoda y transpirable (evita colores oscuros), prepara algo de comida ligera para llevar, lleva crema solar…
Ventila el coche y ajusta el AC
Si tenías el coche aparcado en la calle, procura salir con tiempo para, antes de montarte, ventilar tu vehículo. Durante el viaje, mantén la temperatura del aire acondicionado entre los 22 y los 24ºC y, importante, orienta las toberas hacia arriba, nunca hacia la cara o el pecho. Como sabrás, el aire frío es denso y, por tanto, tiende a bajar. Si las colocas hacia arriba el aire se repartirá mejor por el interior.
Descansa cada 2 h y aparca a la sombra
Lo más recomendable en cuanto a las paradas para descansar es hacerlo cada 200 kilómetros. Es decir, a menos que te metas en un atasco, unas 2 horas. De lo contrario podrá darte fatiga.
De hacerlo, párate. No esperes a que la somnolencia sea demasiado evidente porque es un riesgo. Aparca el coche en una zona que dé sombra y, si no queda otra que hacerlo al sol, no dejes nunca a niños, personas mayores ni mascotas dentro del coche. Este verano además se añade una nueva recomendación: no dejes el gel hidroalcohólico dentro cuando aparques al sol, es inflamable y a la mínima chispa puede calcinarte el coche.
Vigila la temperatura del motor
Importante a vigilar todo el camino: la temperatura del motor. Si se enciende el piloto de que el motor está demasiado caliente, no circules. Para en la estación de servicio más cercana y llama a tu seguro.