El zoo Franklin de Boston tiene un nuevo inquilino, y es uno que gusto a todos. La gorila Kiki, de una especie africana en peligro de extinción, ha dado a luz con algunas complicaciones en el parto al bebé que acapara las miradas del personal. Todavía no tiene nombre, pero es ya toda una estrella desde que el parque lo presentó al mundo a través de sus redes el martes.
Nació por cesárea a las 16:00 EDT del miércoles 14 de octubre, después de un imprevisto sangrado de la madre, Kiki, de 39 años. Se trata de un macho, de 6 libras y 3 onzas en el momento del nacimiento, unos 2,85 kilogramos. Es un tamaño bastante grande teniendo en cuenta que los bebés gorilas suelen pesar entre 3 y 5 libras, como ha apuntado el zoológico.
“Tuvimos la suerte de movilizar rápidamente un equipo increíble con nuestros colegas en el Hospital Brigham and Women's y la Escuela de Medicina Veterinaria Cummings”, ha dicho el doctor Eric Baitchman, del Zoológico de Nueva Inglaterra. "Este fue realmente un esfuerzo de equipo, y estamos aliviados y felices de que la cirugía se haya realizado sin problemas y que la mamá y el bebé estén sanos y salvos".
Kiki está recuperada y cuida ya de su pequeño, mientas el equipo veterinario los monitorea para asegurarse de que todo va bien.
El zoo es un participante activo en el Plan de supervivencia de especies de gorila (SSP), que es un programa cooperativo entre zoológicos coordinado a nivel nacional a través de la Asociación de Zoológicos y Acuarios (AZA). Los SSP ayudan a asegurar la supervivencia de especies amenazadas o en peligro de extinción, como es el caso de Kiki, que es una ‘gorila de las tierras bajas occidentales’, que habita en los bosques de Nigeria, Camerún, Gabón, Guinea Ecuatorial, República del Congo, Angola y República Centroafricana. Fue emparejada con el macho Kit, y antes ya había dado a luz a otras cuatro crías.
A su vez, este parque colabora con la iniciativa Eco-Cell, que se asocia con zoológicos de todo el país para recolectar teléfonos móviles reciclados y restaurarlos para su reutilización, como hacen otras organizaciones como ‘Movilízate por la selva’, fundada por la primatóloga Jane Goodall. Esto reduce la necesidad de la minería de coltán, que causa la destrucción de hábitats de gorilas en peligro de extinción.