Pocas cosas hay más frustrantes que estar trabajando en algo importante y que nuestro PC decida apagarse sin previo aviso, especialmente cuando no hemos guardado lo que estábamos haciendo.

De pronto, Windows empieza a cerrar todos los programas y archivos abiertos, a veces mucho más rápido de lo que nosotros guardamos la información o terminamos de ejecutar ciertas tareas. Si no hemos logrado conservar todo a tiempo, el sistema intentará hacer una copia o nos mostrará un mensaje pidiendo confirmación antes de cerrar cualquier aplicación. No siempre lo consigue, y es entonces cuando perdemos la información.

El apagado del sistema operativo puede venir motivado por varias razones: por ejemplo, actualizaciones automáticas, configuraciones predeterminadas del sistema o incluso apagados programados por otras aplicaciones. ¿Cómo lo arreglamos?

Si tenemos algo de experiencia con la configuración avanzada del sistema operativo de Microsoft, es posible hacer algunos cambios en el registro para alargar el tiempo antes de que el ordenador inicie el apagado. Eso sí, hay que tener cuidado con las modificaciones que hacemos para no afectar el rendimiento del sistema.

Lo primero es abrir el Editor del Registro: Windows + R; escribe ‘regedit’ y presiona Enter).

Una vez allí, navega a la ruta ‘HKEY_LOCAL_MACHINE\SOFTWARE\Microsoft\Windows\CurrentVersion\Policies\System’. En caso de no encontrar la ‘ShutdownWaitTime’, tendremos que crearla manualmente. Solo necesitamos añadir un valor en segundos, que será el tiempo de espera que tendrá Windows antes de cerrar todo.

Windows nos permite crear tareas programadas que pueden ejecutarse en momentos específicos. Para configurarlas, abrimos "Tareas Programadas" desde el menú de inicio y creamos una nueva tarea. Allí podremos elegir ejecutar un script o acción específica cuando el sistema inicie el proceso de apagado.

Por ejemplo, se puede crear una instrucción que salve automáticamente nuestros documentos o que nos avise antes de que el sistema se cierre. Esto nos va a dar dará algo tiempo extra para guardar el trabajo y asegurarnos de que no perdemos nada.

Además de las herramientas nativas de Windows, hay varias aplicaciones externas que podemos instalar para controlar el apagado de cualquier ordenador. ShutUp10 o NoSleep serían dos de las recomendables. Este tipo de programas suelen ofrecer características que nos pueden ser muy útiles como la posibilidad de programar el apagado, reinicios automáticos y recordatorios para guardar nuestros archivos. Si trabajamos con muchos documentos a la vez, pueden salvarnos la papeleta en un momento de apagado traicionero del sistema operativo.

Varios programas de la suite de Microsoft Office incluyen opciones de guardado automático o recuperación de archivos. Si activamos esta función, el sistema guarda todo nuestro trabajo en intervalos regulares sin que tengamos que preocuparnos de hacerlo de forma manual. Esto puede ser clave si Windows se apaga sin avisar, ya que vamos a poder recuperar los archivos cuando volvamos a iniciarlo.

Además, tenemos la herramienta de hibernación, que guarda todo el estado del sistema, incluidas las aplicaciones y programas abiertos, y nos permite reanudar el trabajo exactamente donde lo dejamos. Si no tenemos tiempo de conservar los archivos antes del apagado, activar esta opción puede ser una forma de curarnos en salud.

Otro apartado al que deberíamos prestar atención son las actualizaciones automáticas. Windows suele reiniciar el sistema sin pedírnoslo para instalarlas. La mejor opción en este caso es programarlas para que las realice en un momento en el que no estemos trabajando. Solo tenemos que ir a Configuración > Actualización y seguridad > Windows Update y modificar la configuración para pausar las actualizaciones durante unos días.