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En Canarias se están tratando de paliar los efectos de la sequía mediante unas innovadoras desaladoras creadas en las islas. Se encuentran en el interior de unos contenedores de barcos que se cargan gracias a la energía eólica.
David Perdomo, periodista de Informativos Telecinco, explicaba que en solo 25 metros cuadrados se ha construido la desaladora más eficiente del mundo. Se trata de una pequeña instalación escondida en cuatro contenedores de barcos con la que se puede abastecer de agua a más de 6.000 personas, y tan solo consumiendo un 25% de energía que las desaladoras convencionales.
Con solo un aerogenerador de energía eólica la planta podría funcionar. Esta es una tecnología hecha en canarias que da un paso hacia el futuro en cuanto a la desalación del agua, clave para afrontar la crisis hídrica que ya se vive en las islas.
Este gran invento es el proyecto piloto más eficiente hasta la fecha y una gran solución a la falta de agua en Canarias. Baltasar Peñate Suárez, jefe del departamento de aguas del Instituto Tecnológico de Canarias, explica que con la ayuda de la nueva desaladora se puede pasar de los 2,5 kilovatios por metro cúbico a 1,85 o 1,86. Estos parámetros de consumo representan un 20% o 25% menos que cualquier desaladora que esté operativa hoy en día.
El dispositivo también se puede desplazar en situaciones de emergencia. Peñate Suárez confirma que en dos o tres días puede estar operativa en un emplazamiento porque "las conexiones son bastante rápidas". El cabildo de Tenerife planea instalar estas desaladoras por todo el archipiélago.
Los pueblos de Canarias están siendo golpeados por la sequía y, consecuentemente, lo pueblos sufren cambios. Blanca Pérez Delgado, consejera del Cabildo insular de aguas de Tenerife, confirma que "es muy probable" que a lo largo de esta semana o principio de la semana que viene ya decreten la emergencia hídrica.
"Esto es una circunstancia excepcional, un momento excepcional en una crisis hídrica sin precedentes", decía Antonio Hernández, alcalde de La Guancha. El alcalde añadía que esto es debido al cambio climático que, a su paso, está generando unas consecuencias que "obliga" a imponer restricciones a la población.
Los ciudadanos coinciden en que esto es un desastre y, al fin y al cabo, se resume en un gasto económico que les perjudica. Esta es una crisis que no solo afecta a los vecinos, sino que puede perjudicar negocios como los bares.
Solo falta probar a gran escala este proyecto piloto para suavizar los efectos de la sequía.
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