Este martes podría haber una serie de tormentas geomagnéticas por la llegada de una CME a la Tierra. Esto es, una erupción solar que ha viajado por el espacio tras producirse una explosión en la atmósfera del Sol. Se trata de una CME ‘caníbal’, lo cual quiere decir que es una combinación de dos llamaradas.
La gran mancha solar AR3363 ha producido en las últimas horas una llamarada solar significativa, un evento de clase M6 de larga duración durante las primeras horas del 18 de julio, según informa SpaceWeather. El Observatorio de Dinámica Solar de la NASA registró la explosión cerca del extremo suroeste del Sol.
En las últimas horas, el Sol, que se acerca al máximo de su ciclo solar, ha expulsado dos eyecciones de masa coronal (CME, por sus siglas en inglés), que son enormes nubes de plasma que viajan con los vientos solares por el espacio y a veces se estrellan en la Tierra. Al hacerlo, pueden desencadenar una fuerte tormenta geomagnética.
Cuando la segunda CME alcanza a la primera y se la “traga”, se convierte en lo que llamamos una ‘CME caníbal’, que vienen a ser dos erupciones de plasma solar combinadas.
Durante las tormentas geomagnéticas se producen perturbaciones en el campo magnético de nuestro planeta que pueden provocar apagones parciales de radio y producir visualizaciones de auroras vibrantes mucho más lejos de los polos magnéticos de la Tierra, es decir, lejos de los Polos, y en el peor de los casos pueden afectar a los satélites en la órbita baja de la Tierra e incluso dar lugar a un apagón de internet.
“Las tormentas geomagnéticas intermitentes de clase G1 son posibles durante los próximos 2 días a medida que el campo magnético de la Tierra reverbera debido a una serie de impactos de CME”, indica SpaceWeather.
Las tormentas podrían intensificarse a categoría G2 o G3 el 20 de julio cuando llegue una nueva CME más potente.