La Tierra ya ha superado el límite seguro y justo con 1,15 grados. Millones de personas ya sufren las consecuencias del cambio climático , sobre todo en verano cuando las muertes se disparan. Así lo afirma el nuevo estudio publicado en la revista ‘Nature’ elaborado por la Comisión de la Tierra a través de un equipo internacional compuesto por 51 investigadores como Noelia Zafra, del BC3 Basque Centre por Climate Change (España).
Con esta investigación se cuantifica, por primera vez, los límites para que el planeta sea “seguro” y “justo” para los seres vivos y se pueda evitar escenas como la de este año con el récord de temperatura en los mares. Esto se realiza a través de las mismas variables de control que regulan el mantenimiento de la vida y la estabilidad del planeta y así comprobar la amenaza existencial para la estabilidad planetaria.
Las actividades humanas están alterando los flujos de agua y la liberación de grandes cantidades de nutrientes en las vías fluviales están dejando las áreas naturales limitadas. De ahí que se estén incumpliendo gran cantidad de los límites expuestos. El estudio se divide en cinco áreas para comprobar qué valores hay que seguir y si los estamos siguiendo.
En el clima ya hemos incumplido dos: el límite seguro del calentamiento global respecto a la era preindustrial y la alta exposición a daños climáticos. En la biosfera los datos no son más alentadores. La naturaleza intacta global tendría que estar en un 50% o 60% de la superficie de ecosistema y tenemos un 45% y 50%. En la naturaleza gestionada localmente se incumple el 20% de ecosistemas en cada kilómetro cuadrado que incumplimos en dos tercios del área dominada por los humanos.
Si nos fijamos en el agua, también están los mismos resultados. La alteración del caudal es de un 34% cuando debería ser de un 20% y tener una disminución anual del mismo inferior a la recarga del agua subterránea, que incumplimos en un 47%. En los fertilizantes, el nitrógeno tiene un límite de 57 teregramos y ya estamos con 119 y una cantidad de fósforo de 4,5 y 9 teregramos que excedemos con un 10.
"Estamos en el Antropoceno poniendo en riesgo la estabilidad y la resiliencia de todo el planeta. Por eso, por primera vez presentamos cifras cuantificables y una base científica sólida para evaluar el estado de nuestra salud planetaria, no solo en términos de estabilidad y resiliencia del Sistema Tierra, sino también en términos de bienestar humano, equidad y justicia", así lo aseguraba Johan Rockström, copresidente de la Comisión de la Tierra y director principal de la Investigación sobre el Impacto del Cambio Climático.
Al traspasar varios de esos límites, las consecuencias pueden ser terribles si no se cambia cuanto antes. "A menos que ocurra una transformación a tiempo, es muy probable que se haga inevitable cruzar puntos críticos de cambio irreversible y, en consecuencia, un impacto generalizado en el bienestar humano. Evitar ese escenario es crucial si queremos asegurar un futuro seguro y justo para las generaciones actuales y futuras", añade. Como también comparte Dhe Qin, copresidente de la Comisión, cuando dice que "el sistema de la Tierra está en peligro, ya que muchos elementos críticos están a punto de cruzar sus umbrales, donde habrá un cambio que no será reversible".
Joyeeta Gupta, copresidenta de la Comisión de la Tierra, recalca que la justicia es un valor esencial si queremos cuidar del planeta. "Esta es una conclusión constatada por la comunidad científica en múltiples evaluaciones ambientales importantes. No es una opción política. Hay pruebas abrumadoras de que un enfoque de justicia y equidad es esencial para la estabilidad planetaria. No podemos tener un planeta 'seguro' en términos biofísicos si no hay justicia".