En octubre los días se acortan de 2 a 3 minutos cada día, lo que nos da una mejor oportunidad para observar el cielo en las noches despejadas. La semana que viene se producirán la lluvia de meteoros Dracónidas y una luna llena conocida como Luna del Cazador, que serán los primeros eventos astronómicos relevantes del mes.
A partir del viernes, el anticiclón se va a adentrar sobre la Península Ibérica causando una estabilización del tiempo y un ascenso de las temperaturas generalizado. Según las previsiones, esta situación durará hasta bien entrada la semana que viene, por lo que podríamos llegar a las fechas de la lluvia de estrellas Dracónidas y la luna llena de octubre con cielos muy despejados.
La lluvia de estrellas Dracónidas puede verse en el hemisferio norte entre el 6 y el 10 de octubre, cuando la Tierra atraviesa una región de su órbita donde se encuentran los fragmentos desprendidos del cometa 21P/Giacobini-Zinner,
Cuando uno de esos fragmentos (o meteoroides) entra en contacto con la atmósfera terrestre, se calcina por la fricción con el aire y crea así el resplandor luminoso que conocemos como meteoro o estrella fugaz.
La máxima actividad de la lluvia de Dracónidas se espera que tenga lugar entre el 8 y el 9 de octubre, cuando caerán una media de 20 meteoros por hora a una velocidad de 20 kilómetros por segundo.
En situaciones muy excepcionales, documentadas en 1933 y 1946, se han producido “explosiones” de Dracónidas durante las cuales fueron visibles miles de meteoros por hora. La última vez que se contabilizó un número extraordinario fue en 2011, cuando cayeron 600 meteros en una hora.
La luna llena del Castor alcanzará su máxima iluminación la noche del 9 de octubre, exactamente a las 22:24 hora peninsular española.
Este nombre se atribuye tradicionalmente a la luna llena que sucede más próxima al equinoccio de otoño, que fue el pasado 23 de septiembre, y ha sido utilizado durante milenios por nuestros ancestros en Europa y tribus nativas americanas porque ocurría en el momento del calendario lunar en que los animales se preparan para la hibernación y están mejor alimentados.
El 2022 será un mal año para la observación de las Dracónidas, puesto que su momento de máxima actividad coincidirá con la luna llena del día 9 de octubre, indican desde el Observatorio Astronómico Nacional.