Todo estaba preparado para el lanzamiento de Artemis rumbo a la Luna, la misión más esperada de la NASA, pero a última hora algo ha fallado. La agencia ha comunicado a través de sus redes sociales que el despegue del cohete se cancela por un problema en uno de los motores.
“El lanzamiento de Artemis I ya no se llevará a cabo hoy, ya que los equipos resuelven un problema con una purga del motor. Los equipos continuarán recopilando datos y les mantendremos informados sobre el momento del próximo intento de lanzamiento”, ha comunicado la NASA en sus redes sociales.
La misión debía lanzarse desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en Florida.
El problema estaría en el motor número 3 en la etapa central del cohete SLS (el Sistema de lanzamiento espacial), que debía lanzar la nave espacial Orion hacia la Luna.
A través de la transmisión en vivo de la NASA del lanzamiento de Artemis, se ha explicado que hubo una fuga de hidrógeno que causó una falla de temperatura.
“Los controladores de lanzamiento acondicionan los motores aumentando la presión en los tanques de la etapa central para purgar parte del propulsor criogénico a los motores para llevarlos al rango de temperatura adecuado para arrancarlos. El motor 3 no se está acondicionando correctamente a través del proceso de purga y los ingenieros están resolviendo problemas”, comunicaba la agencia cuando empezaban los problemas.
“Los equipos están en espera en la cuenta regresiva mientras los ingenieros evalúan por qué la prueba para acondicionar los motores no tuvo éxito”, añadían al rato.
Artemis I será la primera de una serie de misiones cada vez más complejas, Artemis I será una prueba de vuelo sin tripulación que proporcionará una base para la exploración humana del espacio profundo.
El viaje de ida a la Luna llevará varios días, tiempo durante el cual los ingenieros evaluarán los sistemas de la nave espacial y, según sea necesario, corregirán su trayectoria. Orión volará a unos 100 kilómetros sobre la superficie de la Luna, y luego usará la fuerza gravitatoria de la Luna para impulsar a Orión a una nueva órbita retrógrada profunda, u opuesta, a unos 70.000 kilómetros de la Luna.
La nave espacial permanecerá en esa órbita durante aproximadamente seis días para recopilar datos y permitir que los controladores de la misión evalúen el desempeño de la nave espacial. Durante este período, Orión viajará en una dirección retrógrada alrededor de la Luna desde la dirección en que la Luna viaja alrededor de la Tierra.
El segundo vuelo del programa, Artemis II, llevará a la tripulación en una trayectoria diferente y probará los sistemas críticos de Orión con humanos a bordo.